Pujol asegura que los cambios en la Generalitat no suponen una crisis

., "Esto no es una crisis, que nadie se haga ilusiones", afirmó ayer el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, en la toma de posesión de los nuevos consejeros de Gobernación y de Justicia del Gobierno autónomo catalán, Maciá Alavedra y Agustí Bassols, celebrada ayer por la mañana.

"Y no se trata de una crisis", argumentó Pujol, "porque no ha habido enfrentamientos, no hay cambio de política ni modificación sustancial de una línea programática". Se trata, pues, "de simples cambios de dos personas", Joan Vidal y Gayola e Ignasi de Gispert, "que han actuado bien, pero que por razones diversas, incluso personales, y por la complejidad de estas dos consejerias, dejan el cargo sin enfrentamientos políticos y manteniendo una plena colaboración con el Gobierno de la Generalitat y con los partidos que lo sostienen", añadió el presidente.

En estas últimas semanas, mientras se gestaba esta remodelación, tanto en la Generalitat como en Convergencia i Unió se tenía verdadero pánico a que la opinión pública identificara cambios en el consejo educativo con crisis política, como ocurre en relación a UCD y el Gobierno del Estado. Se llegó a pensar incluso que para evitar esta imagen la remodelación se aplazaría sine die. Ahora, determinados periódicos, y el propio Jordi Pujol en su discurso de ayer, destacan que es el primer cambio en veintisiete meses de gestión, lo que constituye todo un récord en comparación con el Gobierno de Madrid, e incluso, con la etapa de la Generalitat republicana y de la preautonómica de Tarradellas.

Imagen de continuidad

La imagen de continuidad se pondrá de manifiesto con la confirmación en sus puestos de los equipos de los dos consejeros cesantes, al menos en una primera etapa. El nuevo consejero de Gobernación, Macía Alavedra, no se recata en afirmar que mantendrá la línea de su antecesor, incluso en temas tan polémicos como el decreto sobre los Mozos de Escuadra, impugnado recientemente por el Gobierno del Estado, que intentará aplicar antes de que el Tribunal Constitucional lo deje en suspenso.Macía Alavedra se propone poner el acento en las relaciones institucionales -con ayuntamientos, diputaciones, gobiernos civiles y Ministerio del Interior-, uno de los puntos débiles de su antecesor.

Esta remodelación afectará de rebote a la dirección de Convergencia Democrática (CDC). Alavedra, en función de su anterior cargo de portavoz del grupo parlamentario, es miembro del secretariado permanente de CDC. El nuevo portavoz -Xavier Bigata, con toda probabilidad, aunque formalmente debe ser elegido el próximo martes por el grupo parlamentario- se integrará en el secretariado, pero ningún dirigente del partido se atreve a asegurar que Alavedra vaya a salir del mismo.