'Escándalos romanos', un musical divertido

El cine de parodia sobre el cine tuvo probablemente su origen en esta curiosa película que interpretó el entonces famoso actor Eddie Cantor en 1933. Su divertida visión del cine de romanos tuvo más tarde clarísimos plagios tanto en producciones de Hollywood como en mediocres películas italianas. No fue, sin embargo, superado.Al margen del talento cómico, de este caricato, en Escándalos romanos se añade, además, el virtuoso enloquecimiento del coreógrafo Busby Berkeley que tuvo en los años treinta su época de esplendor. Por la misma época Berkeley enriquecía películas como Vampiresas 1933, Desfile de candilejas o La calle 42: en todas ellas dejó en libertad su barroca imaginación, que le ha colocado, sin duda, en las más altas cotas del cine musical.

Escándalos romanos fue ya emitida por Televisión Española, pero no es inoportuna su revisión. El nombre de Eddie Cantor se ha olvidado con rapidez. El actor abandonó su carrera al acabar la segunda guerra mundial y fue reemplazado con rapidez por otros cómicos que no dudaron en inspirarse en sus extravagantes parodias.

No necesitaba Cantor de muchas justificaciones para orientarse por el absurdo; la película de hoy lo demuestra. Su personaje de joven tímido que se sueña en la antigua Roma da pie a delirantes anacronismos y a la inevitable persecución final que no ha sido superada con facilidad.

Escándalos romanos se emite hoy lunes a las 21.45 dentro del espacio Con h de humor.