Carlos de Gales
heredero de la corona de Inglaterra, está dispuesto a donar su corazón, riñones e hígado para futuros transplantes en caso de fallecer víctima de un accidente. Según informa el diario londinense Sun, el hijo de Isabel II lleva siempre consigo una tarjeta que autoriza a los médicos a que utilicen sus órganos vitales para operaciones que puedan salvar la vida de alguna persona. Los portavoces del palacio de Buckingham, residencia de la soberana británica, no han confirmado la información dada por el rotativo de Londres.
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