Críticas a Segurado por sus declaraciones contra Adolfo Suárez

Las declaraciones de José Antonio Segurado, presidente de la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM) y vicepresidente de la CEOE, adelantando que los empresarios madrileflos no apoyarán a UCD si concurre a las elecciones encabezada por Adolfo Suárez, han provocado encontradas reacciones y profundo malestar en sectores políticos y financieros.La patronal de pequeños y medianos empresarios de Madrid (Unipyme-Madrid), que no está integrada en la CEOE y cuenta con dirigentes muy próximos a Agustín Rodríguez Sahagún, desautorizó la actitud de José Antonio Segurado y la representatividad que se arroga, al tiempo que el Banco de Santander urge a UCD el pago de una deuda.

"José Antonio Segurado se ha permitido una vez más hablar en nombre de todos los empresarios madrileños, para negar o prometer apoyo a distintas corrientes del pensamiento político, así como a dirigentes de este o aquel partido. Y lo ha hecho cuando sólo podría, como presidente de CEIM y con el consentimiento de sus afiliados, pronunciarse en nombre del 7% de los empresarios madrileños, ya que el resto, el 93% de los empresarios de Madrid, están afiliados a Unipyme-Madrid y otras organizaciones independientes", afirmó el viernes, en el transcurso de un acto empresarial, Fernando González Olivé, presidente de Unipyme-Madrid.

Segurado debe afiliarse

Las declaraciones del vicepresidente de la CEOE han comprometido la imagen del empresariado. González Olivé añadió que "las inclinaciones políticas de José Antonio Segurado, como expresión de sus preferencias personales, son respetables. En un ejercicio de coherencia, Segurado debería decidirse a militar públicamente en un partido político, para no violentar su inclinación, y hacer, desde esa militancia, las declaraciones políticas de adhesión y rechazo que desee". "Porque Segurado", recalcó González Olivé, "no está legitimado, y él lo sabe, para hablar generalizando en nombre de los empresarios de Madrid".Según Fernando González Olivé, cuando los dirigentes de CEIM y CEOE se comprometen políticamente, "hecho que sucede con frecuencia", deben precisar que lo hacen en el marco de su representación, y no en nombre de "los empresarios de Madrid o de los empresarios españoles".

"Las organizaciones empresariales", concluyó González Olivé, "no pueden pretender, de forma corporativa, superar la condición de ciudadanos que poseen los empresarios españoles, suplantando su voluntad personal, comprometiéndolos con declaraciones políticas como las efectuadas por el presidente de CEIM".

José Antonio Segurado, según dio a conocer ayer la agencia Efe, almorzó en los últimos días de la semana pasada con Alfonso Guerra, vicesecretario general del PSOE y chivo expiatorio de buena parte de las críticas que públicamente se hacen desde la patronal al partido socialista.

Según las fuentes empresariales consultadas por la agencia Efe, que calificaron la reunión de "muy cordial y provechosa", la sobremesa se prolongó por espacio de cuatro horas. Y el almuerzo puede venir a coincidir con el nuevo entendimiento pretendido por la CEOE con el partido socialista, cuyas relaciones se han deteriorado en los últimos meses, tras la campaña desarrollada por los empresarios en las elecciones andaluzas.

Según algunas informaciones, añade la agencia, sectores importantes de la CEOE propician un entendimiento -que no acercamiento- con los dirigentes socialistas para poder llevar a buen puerto un entendimiento entre empresarios y Gobierno, en el caso de que los socialistas pudieran alcanzar la mayoría en las próximas elecciones legislativas.

En medios políticos y empresariales, consultados a raíz de esta noticia, no ha habido gran sorpresa por este encuentro Guerra-Segurado, dado que se atribuye a éste último una política de radicalismo verbal contra los socialistas, de cara a, capitalizar las bases de la patronal en provincias que están muy derechizadas, y prudentes contactos a nivel de dirigentes para tranquilizar al gran empresariado y a la banca.

El Banco de Santaner, por otra parte, ha requerido a los diputados Ciriaco Díaz Porras (hoy en el partido de Fernández Ordoñez) y Justo de las Cuevas, que aparecen como avalistas de una letra por 37 millones de pesetas contra UCD, para que salden el compromiso contraído con el citado banco.