El índice de producción industrial desmiente las afirmaciones optimistas de las autoridades económicas

La producción industrial española cayó en tasa interanual dos puntos en febrero pasado. Esta cuantificación del índice de producción industrial, que acaba de ser concretada por el Instituto Nacional de Estadística, pone en entredicho -por segundo mes consecutivo- las declaraciones optimistas realizadas por algunos ministros, en el sentido de que había signos de una cierta recuperación económica, y contradice a Información Comercial Española, boletín del Ministerio de Economía y Comercio, en el que se habla de "moderada expansión de la actividad económica" en el primer trimestre.

Economía y Comercio, en la citada publicación, sostiene que "la información estadística disponible sugiere que en el primer trimestre del año la actividad se mantiene en moderada expansión, a lo que podría estar contribuyendo, además de la inversión fija y la exportación, como hasta ahora, el consumo privado". Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) apuntan, sin embargo, unas caídas interanuales de 5,6 y 1,8 puntos en la producción de bienes de consumo en enero y febrero de este año.El optimismo oficial, cuyos principales paladines son los ministerios de Economía y Comercio y el de Industria y Energía, se basa en las encuestas de opinión que realiza entre los empresarios éste último departamento. La fiabilidad y representatividad de los resultados de esta encuesta no sólo es cuestionada por los expertos en coyuntura del sector privado, sino que puede descubrirse incluso -entre líneas-en algunas publicaciones oficiales.

En el último Boletín Económico del Banco de España, por ejemplo, después de desarrollar la tesis oficial del moderado optimismo, se cuestiona la validez de su exposición al añadir: "No obstante, es preciso recordar que las perspectivas halagüeñas señaladas por las encuestas de opiniones empresariales con respecto a la industria de bienes de inversión, en el segundo semestre de 1981, contrastaron marcadamente con el importante descenso del índice de producción industrial de bienes de inversión del cuarto trimestre respecto al trimestre anterior, lo que crea una interrogante sobre la representatividad de los resultados de las encuestas para el primer trimestre de 1982".

La ligera y relativa mejoría del índice de producción industrial de febrero con respecto al mes precedente, al reducirse de 3,3 puntos a dos puntos la caída interanual del citado indicador, puede explicar el que algunos empresarios respondan diciendo que les va algo mejor a la encuesta de opinión de Industria; pero no significa que en términos de actividad anual se haya interrumpido el proceso de deterioro de la economía.

Para algunos economistas, los últimos datos de producción facilitados por el INE cuestionan la eficacia de la política salarial pactada por el Gobierno con empresarios y sindicatos. La pérdida de poder adquisitivo por parte de los trabajadores, a juzgar por la evolución del índice de producción de bienes de consumo, se ha traducido en una caída de la demanda y, en consecuencia, ha contribuido a agravar la crisis.

Consumo y política salarial

Estas afirmaciones contrastan radicalmente con el optimismo oficial de Economía y Comercio: "Con datos completos del primer trimestre de 1982, los resultados de las encuestas mensuales de coyuntura industrial resultan favorables en su conjunto. Las respuestas sobre carteras de pedidos, que comenzaron el proceso de mejoría hace ya un año, han continuado en una línea de aceleración de dicho proceso iniciada en diciembre pasado, cuando a la agrupación de bienes de inversión vinieron a sumarse con mayor fuerza las de bienes intermedios y, sobre todo, de consumo".Los bienes de consumo, sin embargo, cayeron en tasas interanuales 5,6 puntos en enero y 2,7 puntos en febrero. Según los expertos, la pérdida de poder adquisitivo por parte de los trabajadores en las últimas negociaciones colectivas está contribuyendo, al no haber logrado equilibrar la balanza de pagos (sólo se ha producido una ligera mejoría en la cuenta comercial) y no haber conseguido que aumente el ahorro, a una caída del consumo y a un agravamiento de la crisis.

El índice de producción de bienes de inversión, aunque muestra una sensible mejora con respecto a enero, supone en tasas interanuales una nueva caída de 3,6 puntos.

Esta depresión contrasta con incremento real de las inversiones del Estado, que han podido crecer más de un 40% en el primer trimestre, y de las empresas públicas. Ello quiere decir que el empresario privado sigue sin invertir y que esta actitud puede hacer fracasar las esperanzas del Gobierno de reactivar la economía y crear puestos de trabajo mediante un fuerte tirón de las inversiones.

Los expertos en coyuntura esperan, no obstante, una mejora de la actividad en los datos de mayo y junio como consecuencia de la terminación de distintas obras para el Mundial de Fútbol y de la celebración de este acontecimiento deportivo.