La selección jugó un partido contra juveniles a puerta cerrada
La selección española de fútbol disputó ayer un partido con un equipo juvenil del Valencia. En la primera parte el conjunto nacional alineó a los mismos jugadores que se enfrentaron a Suiza el pasado 28 de abril en el último encuentro amistoso disputado por España antes del Mundial, alineación inicial que tiene visos de convertirse en titular durante el torneo. El desarrollo del partido no pudo ser observado por los informadores, lo que provocó el primer brote serio de tensión.
Santamaría alineó ayer frente a los juveniles del Valencia al conjunto con más posibilidades de ser titular en el Mundial, a excepción de Arconada que se alineó con los juveniles: Urruticoechea; Camacho, Alexanco, Tendillo, Gordillo; Gallego, Zamora, Alonso; Juanito, Satrústegui y López Ufarte. En la segunda mitad del encuentro jugaron Urruticoechea; Urquiaga, Maceda, Jiménez, Quique; Saura, Sánchez, Joaquín; Uralde, Quini y Santillana. Las dos selecciones marcaron un total de siete goles obra de Gallego, Satrústegui, Zamora, Juanito, Quini, Sánchez, de penalti, y Santillana.Durante el encuentro Santamaría detuvo el juego en varias ocasiones para corregir defectos y ensayarjugadas.
Este primer partido de la selección española frente a un tercer equipo no pudo ser observado por los informadores destacados en El Saler, circunstancia que motivó la primera tensión real entre los responsables de la concentración y los medios de información. Sólo los fotógrafos y las cámaras de televisión tuvieron acceso al campo de fútbol adosado al parador nacional Luis Vives.
El seleccionador se remite, ante la prohibición, a las directrices de la Federación Española de Fútbol, y los delegados federativos a instanclas superiores de la organización del Mundial. En ocasiones, unos y otros aducen cuestiones de seguridad. Sin embargo, el responsable de seguridad en la sede española admite que sólo cumple órdenes superiores y que si esas instancias dan permiso a los infórmadores acreditados para presenciar los entrenamientos no tiene ningún incoveniente, porque a priori no se vislumbra que pueda existir ningún tipo de alteración del orden.
Santamaría mantiene su postura de silencio sobre el posible descarte o descartes, en plural. No obstante, parece claro que el hombre que volverá a casa será uno de los 11 jugadores no titulares frente a Suiza. Resulta prematuro barajar nombres, pero en esta presunta rifa Joaquín, Quique y Santillana tienen muchas papeletas. La presencia del pichichi Quini es práctica obligatoria en todas las selecciones y Saura es jugador valenciano. Santamaría decidirá la presencia de nuevos elementos a última hora y ofrecerá la lista decisiva de 22 jugadores el último día es decir, a las 0,00 horas del día 6 de junio próximo.
El cuadro médico de la Federación Española de Fútbol ha facilitado al seleccionador el resultado de los últimos análisis de los jugadores. Todos los preseleccionados, según la escueta información facilitada, gozan de un perfecto estado de salud.
La selección española volverá mañana a disputar un partido a los jugadores del Valencia. Santamaría quiere dedicar dos días de la semana a este tipo de entrenamiento, que es absolutamente necesario para definir el estilo del equipo. El seleccionador nacional comentó ayer su deseo, compartido por todos los jugadores, de que el primer partido que el equipo dispute en el Mundial, frente a Honduras, sea un triunfo aplastante. Santamaría, quien aflirmó que "no tengo miedo a nadie, pero respeto a todos", piensa que es clave una victoria clara para afrontar el resto del campeonato con ánimos.
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