Técnicos y jugadores, inquietos ante la caótica situación del Atlético

García Traid, entrenador, Angel Vilda, preparador físico, y la plantilla de jugadores del Atlético de Madrid se muestran preocupados e inquietos ante la confusa situación que atraviesa el club, y que fue tratada ayer por la Federación Española. Nadie sabe nada en temas como la posible gira que pueda realizarse este mes, Ias renovaciones de los que acaban contrato, o la planificación para la próxima temporada. Algún jugador está dispuesto a denunciar su contrato si se le echa del club y no se le paga el 30 de junio.

Lo único claro que tiene el cuerpo técnico y la mayoría de jugadores rojiblancos es que hay que seguir con los entrenamientos, con el trabajo, a la espera de lo que ocurra. Pero existe un nerviosismo evidente, que no se centra únicamente en aquellos jugadores que terminan su contrato, sino también ante las negras perspectivas de pago cuando se cumpla el último plazo reglamentario. Son 188 los millones de pesetas que al 30 de junio deberá hacer frente el club, con la amenaza de un descenso de categoría si se mantienen las deudas, en virtud de la nueva reglamentación.Algunos jugadores, como Marcelino, confían, pese a todo, en que al final se encontrará una solución. "Es lógico que la actual situación influya en nosotros, pero quien venga tendrá que cumplir con los contratos. Espero que todo vuelva a su cauce, que el Atlético recupere la buena organización y se pueda empezar la próxima temporada con tranquilidad".

Por lo pronto ya se va con retraso en la planificación de las renovaciones, de la pretemporada, de los fichajes, de todo Angel Vilda, preparador físico, al que le quedan dos años de contrato, afirma que "para el 1 de junio ya debería estar todo organizado. El cuerpo técnico no sabe nada de lo que va a pasar. Ya, vamos con retraso. La temporada anterior ya habíamos realizado dos viajes a La Molina planificando la pretemporada, que, por cierto, fue un éxito. Hay que decidir casi todo antes de que se inicien las vacaciones. Aún se está a tiempo de recuperar lo perdido, pero más tarde".

Tampoco sabe mucho más García Traid, entrenador del equipo, a quien nadie le ha pedido un informe sobre la plantilla y el futuro. También desconoce si continuará. "Nadie me ha dicho nada. La situación es muy confusa, especial; yo creo que no se ha dado nunca en el fútbol. Lo único que puedo hacer es seguir trabajando, como es nuestra obligación. Claro que pienso muchas cosas, pero no quiero decir algo que pueda perjudicar aún más a la entidad. Por supuesto que yo lo tengo todo dispuesto. Pero no queda más remedio que callar y trabajar".

Denuncia de contratos

De los doce jugadores que acaban contrato hay algunos de los que se asegura que no van a continuar. Uno de ellos es Leal. "Yo lo tengo muy claro. Si me retienen, seguiré un año más e intentaré recuperar la titularidad y jugar. Si me dan la libertad, tendrán que pagarme, porque estaré en mi derecho, en caso contrario, de denunciar el contrato. La verdad es que la situación es un poco caótica. No se, sabe nada: si Cabeza se ha ido o si se queda, si los directivos han dimitido, si continúan... Un follón".Otros tres de los hombres que acaban contrato, Mejías, Juanjo y Navarro, tampoco ven clara la situación. Los tres esperan seguir. A Juanjo se le prometió la continuidad y parece confiado en ello, Navarro argumenta que ahora mismo nadie puede tomar una decisión. A lo mejor, si un jugador vale para una directiva, para otra puede que no sea así. La situación es muy complicada". Y Mejías, con la ficha más baja de la plantilla, quiere dejar zanjado su futuro antes de las vacaciones.

Y queda lo de Hugo Sánchez. El mexicano asegura que "es la primera vez que me ocurre una cosa así. Sí, me deben bastante dinero. Pese a todo, yo quiero seguir, aunque no he hablado nada de mis condiciones, a la espera de que se resuelva o no el pago de los 75 millones al Universidad de México. A lo mejor mi anterior club puede dar facilidades para que el Atlético pague este dinero. Hasta el 10 de junio, que expira el plazo, hay tiempo".