¿Irregularidad bancaria?
Yo, José Quijano Feliu, industrial santanderino, y mi esposa, tenemos cuatro libretas de imposición a plazo fijo en el Banco Hispano Americano. Cuando hace ya años uno de los directores de la oficina principal de Santander cometió determinadas irregularidades que ocasionaron su destitución y traslado como simple empleado a Zaragoza, en virtud de la situación creada, la entidad bancaria se adueñó de estos millones alegando el reintegro de las cartillas. Para tapar este enjuague el banco simuiló la existencia de una letra de cambio por importe de cinco millones de pesetas, aparentemente aceptada por nosotros dos y en virtud de la cual existía un saldo deudor, que justificaba la aplicación al mismo del dinero existente en las libretas y también empleó otros varios documentos falsos.Analizadas las firmas múltiples por varios peritos, entre los cuales se encuentran catedráticos de las Escuelas de Medicina Legal de Madrid y Salamanca, así como varios censores jurados de cuentas, se determinaron que las firmas habían sido falsificadas y que los pretendidos saldos deudores eran igualmente inveraces e inventados por el banco, que al retener las libretas desde el año 1962 adeuda entre capital e interés sin contar los daños materiales, ya que en la actualidad tengo todos los bienes embargados.
Yo tengo presentada una querella por estos hechos que se tramitia en el Juzgado de Instrucción número 2 de los de Madrid, donde ocurre un extraño fenómeno: la documentación que se requiere al banco, por estar en sus manos, para que justifique su actitud, no es entregada desde hace muchos, meses en que le fue pedida. Me pregunto: ¿qué le ocurre al Banco Hispano que no puede justificar el haberse quedado con más de mil millones de pesetas? Esperamos que pronto sepamos la solución./
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