Se confirmó la momentánea tendencia positiva de las bolsas

A las bolsas españolas les tocaba subir ayer, y para no desanimar a sus incondicionales, mejoraron sus posiciones en relación a los cierres de las reuniones anteriores, gracias a las aportaciones especiales de Iberduero y los bancos.La actuación estelar de las acciones del grupo bancario, que, sin abandonar su política de moderación, han mejorado globalmente sus cambios, y el inusitado empuje de Iberduero, que probablemente ha desbordado los pronósticos de los más optimistas, entre los que tal vez se hallaban incluso los propios responsables de la empresa, han dejado en entredicho un día más a los mercados nacionales de valores, que se les ocurre iniciar una etapa alcista precisamente en el momento en que los tipos de interés en los mercados internacionales se han relanzado, acompañando con sus subidas a las mejoras del oro.

Las reuniones tuvieron realmente muy poco más que contar. La actividad se centró en los corros eléctricos, donde la negociación resultó, con diferencia, la más activa de la mañana, a pesar de que los recortes se sucedieron en los valores punteros, probablemente como consecuencia de reajustes técnicos por parte de quienes buscaban recomponer sus carteras y situarlas en mayores niveles de rentabilidad, reconduciendo sus posiciones hacia inversiones en dólares o en eurodivisas, en espera de que la actual conmoción de las finanzas internacionales confirme los mayores niveles retributivos de los depósitos.

Ni el incalificable incidente provocado por el teniente general Milans del Bosch y sus compañeros encausados, al abandonar airadamente la sala donde se celebra la vista por el intento de golpe de Estado del 23-F, ni la conmoción internacional que ha causado la ocupación de las islas Malvinas, en poder desde hace 149 años de los británicos, por tropas del Ejército argentino, han tenido mayores repercusiones en los mercados nacionales de valores.

Para quienes no están demasiado introducidos en los peculiares modos de comportamiento de las bolsas españolas, constituye un perpetuo motivo de sorpresa, cuando no de escándalo, la escasa permeabilidad de los centros locales de contratación de valores mobiliarios, a las noticias que conmueven al universo financiero. Pero es que las bolsas españolas que arrastran varios decenios de contemplarse ensimismadas su propio ombligo -la legislación vigente tampoco permite muchas alegrías más-, continúan mostrándose prácticamente inasequibles a todo lo que no sea su propia realidad, y, como la pura estrategia de los principales implicados en el negocio bursátil recomendaba el reiniciar los procesos alcistas en estas fechas, las bolsas españolas comenzaron a subir, con independencia del resto del entorno financiero.

Para la reunión de la mañana de hoy, la última de esta semana vacacional, se plantea la incógnita de si los especialistas decidirán quemar sus naves y conformarse con las plusvalías acumuladas en las últimas reuniones, o si, por el contrario, decidirán mantener sus posturas y esperar a que el regreso de las próximas vacaciones de numerosos inversores, suponga la confirmación momentánea de la tendencia positiva, que será mucho más difícil de sostener, a medida que se vayan aproximando las elecciones al Parlamento andaluz.