Enfrentamiento en Euskadiko Ezkerra por la composición ole su comité ejecutivo
La corriente Nueva Izquierda, que agrupa un tercio de los militantes de Euskadiko Ezkerra (EE-IPS), no participará en el comité ejecutivo del partido, elegido el sábado, hasta que se respete el principio de proporcionalidad en la distribución de cargos entre las distintas tendencias.
El conflicto se ha planteado casi inmediatamente después del congreso de unificación del Partido para la Revolución Vasca (EIA) con el Partido Comunista de Euskadi (PCE-EPK), al atribuir el comité central siete puestos del ejecutivo a Nueva Izquierda, mientras esta corriente considera que le corresponden diez, sobre un total de treinta miembros.
Sin embargo, Vicente Serrano Izco e Iñaki Múgica Arregui, los más conocidos dirigentes de Nueva Izquierda, manifestaron ayer que el problema principal no es de números, sino de filosofía política. "EE-IPS", dijeron, "debe aplicar en el interior del partido los mismos principios que preconiza para la sociedad, y en este caso, el respeto al pluralismo y a una dialéctica de síntesis, con preferencia sobre la imposición de la mayoría a la minoría. Si no es así, preferimos un ejecutivo monocolor.
Los representantes de Nueva Izquierda aseguraron que esta actitud no supone más que una diferencia interna, que podría resolverse mediante el diálogo. "Continuamos plenamente identificados con el proceso de convergencia, con los resultados del congreso y con el proyecto que representa EE-IPS, y mantenemos todas las restantes responsabilidades en el partido".
Por su parte, fuentes del sector mayoritario, integrado por la tendencia aketegi de EIA, que encabeza Mario Onaindía, y por los militantes procedentes del PCE-EPK, negaron la existencia de cualquier tipo de acuerdo previo para la composición del comité ejecutivo y se refirieron a los estatutos.
