La Real, adelante tras 120 minutos de juego y 10 penaltis

La Real Sociedad ha necesitado toda la mala suerte del Athlétic, 120 minutos y cuatro penaltis en la tanda decisiva, para eliminar al Athlétic de Bilbao, tras un partido duro, fogoso, y que a veces terminó de malos modos. Los bilbaínos han sabido jugar mejor, derrochando fuerza, empuje, agresividad hacia la meta de Arconada, mientras que la Real, posiblemente por la ausencia de Zamora, no realizó en ningún momento un partido djgno de su clasificación.Los bilbaínos intentaron jugar a los blanquiazules al contraataque, manteniendo atrás el control del balón, pero con el gol tempranero de la Real, se lanzaron abiertamenmte al ataque. Bien apoyados por un centró del campo trabajador, al que a veces se sumaban Dan¡ y Noriega, llegaron a acorralar al contrario. La Real Sociedad sólo puso la habilidad de López Ufarte, el entusiasmo de Uralde, y la serenidad de la zaga. Poco más, porque el embarullamiento general no les permitió crear una jugad a clara de gol. Sin embargo, Arconada tuvo que estirarse para detener disparos de Dan¡ y Sarabia.

En el segundo tiempo, el Athlétic, además de seguir tan sereno como en el primero, adelantó líneas, reforzando el medio campo con las subidas de Goicoechea. Los rojiblancos se debieron dar cuenta de que eran eminentemente superiores. Así vino su primer gol, y ni siquiera después de que la Real se adelantara en dos ocasiones, cejaron en su empeño.

El Athlétic, tras el fallo de Gallego, se lanzó en tromba, demostrando una fuerza fisica desconocida, y grandes ilusiones por seguir en la Copa. A diez minutos del final, viendo que sus esfuerzos eran baldíos, esperaron a la prórroga. Esta poco dio de sí, temerosos todos y resignándose a la suerte de la pena máxima. Al fallar Goicoe chea el penalty, la Real Sociedad rompió la tradición de cinco eliminaciones en la Copa a manos del Athlétic. Para la sexta, a Clemente le sobró mala suerte. Tendrá que esperarse otra temporada, como la afición de San Mamés, para sacarse la espina, ya profunda.

El Spórting, por la mínima

El Spórting de Gijón es el tercer equipo clasificado, gracias a un solitario gol de Ferrero, que transformó un pase de Abel en el minuto 19 de juego. El partido fue emocionante, porque el Spórting no consiguió como se preveía una goleada ante el Deportivo de La Coruña, de Segunda División. Pese a la clasificación, la crisis del equipo asturiano es evidente. Con los mismos problemas de hace un año para marcar goles, ha descendido la calidad de sus juego y se han iniciado las salidas de tono de algún jugador, que antes eran impensables. La Copa puede ser la alegría de la afición asturiana, si el equipo reedita su éxito de la pasada edición.