Miembros de la banda ultraderechista desarticulada en Sevilla se confiesan militantes de Fuerza Nueva

Diecisiete individuos han sido detenidos por funcionarios de la Brigada Regional de Información como presuntos autores de numerosas acciones terroristas de significación ultraderechista en dos servicios paralelos desarrollados durante el mes de diciembre, según se informó ayer oficialmente en Sevilla.

Varios de los detenidos se confiesan simpatizantes o militantes de Fuerza Nueva, Fuerza Joven y Falange Española de las JONS. Esta ha sido la operación más relevante llevada a cabo en los últimos años contra activistas de ultraderecha en las provincias andaluzas de Sevilla, Cádiz y Huelva.Acerca del primer servicio policial, del que informó EL PAIS el miércoles, 30 de diciembre, el Mando Unico para la Lucha Antiterrorista hizo pública ayer una nota en la que daba cuenta de la detención de once personas y el esclarecimiento de cinco acciones violentas en las que presuntamente aparecen vinculados como autores o inductores. Se trata de Juan Carlos Rodríguez Fernández, José María Osborne Ybarra, Manuel Castaño Martín, José Antonio Palacios Fernández, Alfredo José Moreno Ruiz, Aquilino Toucedo Gómez, José Vargas Escobar, Bonifacio Caro Caro, Francisco de Murga Rodríguez, Sergio-Medina López de Haro y Juan Manuel Machuca Ortega. Salvo tres de ellos, todos los demás han ingresado en la prisión provincial de Sevilla, excepto los apellidados Medina y Machuca, que han sido puestos a disposición del capitán general de la Zona Marítima del Estrecho, por estar cumpliendo el servicio militar en unidades de Marina, dependientes de la citada autoridad.

La nota policial les acusa de haber incendiado, con botellas con gasolina, las sedes de Comisiones Obreras (CC OO) del metal y de UGT de Sevilla, así como la de CC OO de Manzanilla (Huelva); los vehículos de dos concejales del Ayuntamiento de Villaverde del Río (Sevilla) y el del alcalde de la citada localidad onubense. Todos estos siniestros tuvieron lugar en los dos últimos años. A Manuel Castaño se le intervino una pistola Astra, de nueve milímetros, y dos cargadores con munición para la misma, sin que poseyera licencia para ello. A Francisco de Murga se le encontraron cinco cartuchos de explosivo del tipo Goma 2. Ambos se declaran simpatizantes de Fuerza Nueva (FN).

Las autoridades gubernativas creen que el individuo que facilitó el arma y el explosivo a los dos anteriormente citados es un alto dirigente de Fuerza Nueva de la provincia de Huelva que se encuentra en Chile desde finales del pasado mes de noviembre. Su nombre no fue facilitado ayer a los informadores, así como tampoco el de otros dos implicados en las acciones terroristas descritas y que no han sido, igualmente, detenidos tras la actuación policial.

El otro servicio, del que informó de manera oficial el Gobierno Civil de Sevilla, ha consistido en la detención de seis jóvenes ultraderechistas, simpatizantes de Fuerza Joven, rama juvenil de FN. Cinco de ellos, Ildefonso Padilla Gaoria, Francisco Javier Reche Blázquez, José Antonio Calvillo Galisteo, Fernando Luis Carnevali Santigosa y José María Tavallo del Nido participaron, según las diligencias policiales, en una manifestación ilegal celebrada durante la tarde del 6 de diciembre, aniversario de la aprobación de la Constitución, en el barrio residencial de Los Remedios, en Sevilla.

En el transcurso de dicha manifestación se volcaron vehículos estacionados en la vía pública y se colocaron vallas metálicas para obstaculizar el tráfico. El último de los citados, que también ha pasado a disposición de la autoridad militar, por encontrarse haciendo el servicio militar en la Marina, es sobrino del jefe regional de Andalucía de Fuerza Nueva, José María del Nido. También se detuvo a Diego Benítez Benítez, por su supuesta implicación en otros hechos de la misma naturaleza, aunque no especificados.

El gobernador civil de Sevilla, José María Sanz Pastor, comentó anoche en una conferencia de Prensa que lo novedoso de estas detenciones es que muchos de los implicados se han declarado simpatizantes o militantes de Fuerza Nueva, partido que, aunque mínimamente, tiene carácter parlamentario. «Tengo que manifestar mi sorpresa», indicó el gobernador, « por el hecho de que un partido que, gracias a la Constitución y a las libertades que ésta consagra, puede acudir a las elecciones, tenga en su seno, sin haberlas expulsado, a personas que participan en acciones terroristas».

Sanz Pastor confesó no tener constancia de que los detenidos estén integrados en algún movmiento desestabilizador en tornio al proceso a los implicados en el golpe militar del 23F.