Expediente de suspensión de pagos en Tornillería del Nalón

La empresa Tornillería del Nalón adquirida en 1977, cuando atravesaba una grave crisis, por José María Galarraga, considerado entonces por las autoridades asturianas y por los propios trabajadores como el salvador de la sociedad langreana, ha presentado ante el juzgado de Pola de Laviana un expediente de suspensión de pagos, que ha sido interpretado en medios laborales como la reaparición de la amenaza de cierre.

Medios próximos a los anteriores propietarios de Tornillería, quienes sufrieron fuertes presiones para vender su participación al empresario vasco Galarraga, han criticado severamente a las autoridades provinciales, singularmente al entonces gobernador civil José Aparició Calvo Rubio, que recibió el tornillo de oro como reconocimiento a las gestiones realizadas para conseguir el cambio de titularidad de la empresa.En marzo de 1977 los propietarios felguerinos de Tornillería del Nalón tramitaron ante la Delegación de Trabajo un expediente de crisis y ante el juzgado de Pola de Laviana, la suspensión de pagos" por carecer de liquidez para hacer frente a un pasivo que ascendía a 47 millones de pesetas.

La "solución Galarraga" surgió después de tres meses de intensas movilizaciones de los trabajadores, que fueron presentadas como el símbolo de la lucha de la clase obrera asturiana para evitar un cierre que parecía inevitable. El empresario vasco compró Tornillería a cambio de determinadas concesiones de los poderes públicos y de unas exigentes condiciones laborales, aceptadas por los trabajadores. Sin embargo, el pasado mes de mayo, Galarraga expuso a los responsables de UGT y CC OO el incumplimiento de los, compromisos adquiridos por la Administración en la solución de la crisis de la empresa.

En consecuencia, argumentaba Galarraga, la viabilidad de la empresa se encuentra en peligro, a pesar de que con veinte trabajadores menos que en 1976 había conseguido incrementar considerablemente la producción. El pasivo en cambio, ascendió a 174 millones de pesetas, un 37% superior al de hace cuatro años.