Rescatados dos marineros vizcaínos después de permanecer cuatro días a la deriva

Angel Fernández y Miguel Escalante, dos marineros vizcaínos de 39 y 42 años de edad, respectivamente, fueron rescatados a veinte millas de la costa guipuzcoana por el buque holandés Anna y conducidos al puerto de Pasajes el martes por la noche, después de haber permanecido casi cuatro días a la deriva, en una pequeña embarcación, sin alimentos ni agua.

Los dos marineros, que fueron dados de alta ayer en el hospital de la Cruz Roja, habían partido el sábado por la tarde de Plencia (Vizcaya) a bordo de un bote de seis metros de eslora recién adquirido, con motor diesel, que pretendían trasladar a la vecina localidad de Portugalete, donde ambos residen. El motor sufrió una avería y quedó inutilizado a la altura de Punta Galea, cuando habían recorrido más de la mitad de la distancia prevista. Los dos náufragos lanzaron una bengala de socorro, que fue vista desde el superpuerto vizcaíno y motivó la entrada en acción de los servicios de salvamento de la Cruz Roja del Mar, con la colaboración de helicópteros de la Armada y la Guardia Civil. Pese a la intensa búsqueda practicada y a la colaboración de los pesqueros que faenan en la zona, no fue posible dar con los marineros perdidos.

Entre tanto, la embarcación de Fernández y Escalante navegó a la deriva, ya que no existían remos o cualquier otro elemento auxiliar a bordo. Tampoco llevaban agua ni alimentos, por lo que los dos náufragos tuvieron que limitarse a beber pequeñas cantidades de agua de mar.

Desde Punta Galea hasta el lugar donde fueron localizados por el buque holandés Anna, los marineros recorrieron a la deriva más de un centenar de kilómetros. En el momento de ser rescatados se encontraban exhaustos, y se les daba por definitivamente desaparecidos. El bote en el que se habían hecho a la mar quedó abandonado al comprobar el barco holandés la imposibilidad de remolcarlo hasta el puerto de Pasajes, donde desembarcó a Angel Fernández y a Miguel Escalante.