_
_
_
_

El PNV expulsa a trece miembros del sector sabiniano

El tribunal nacional del PNV, órgano encargado de dirimir los conflictos internos del partido, ha comunicado a trece afiliados, todos ellos pertenecientes al sector sabiniano, y entre los que se encuentran cuatro antiguos miembros del Consejo Nacional, su expulsión de dicho partido.Los expulsados, entre los que figura Josu Arenaza, conocidísimo militante durante los años de la clandestinidad, son acusados de «desacato a la autoridad del partido» y de «intentar desprestigiar la imagen del PNV», por haber publicado, con sus firmas, un artículo que apareció al menos en dos diarios locales en el que se acusaba a la actual dirección de connivencia con determinados sectores de UCD y de la gran banca.

Esta acusación constituía a su vez la respuesta del sector sabiniano a las insinuaciones aparecidas en el primer número de la hueva revista del PNV, Euskadi, según las cuales dicho sector estaría actuando como cabeza de puente en Euskadi de una cierta operación Garrigues. Los ataques a Arzallus en determinados órganos de Prensa considerados interesados en la promoción del presidente de los clubes liberales serían una prueba de la existencia de esa operación y de la complicidad en la misma del sector enfrentado al actual presidente del PNV.

La respuesta de los sabinianos provocó la apertura de un expediente, culminado ahora con la expulsión de trece de los veinticinco firmantes del artículo en cuestión. (Los otros doce firmantes, entre los que figuraba el líder del sector sabiniano, Antón Ormaza, ya habían sido expulsados anteriormente.)

En opinión de Josu Arenaza, la decisión de expulsarles a todos estaba «tomada hace tiempo, y sólo esperaban a encontrar el pretexto». El grupo de Ormaza-Arenaza se caracteriza por la defensa de posiciones sociales y culturales muy conservadoras, que hacen compatibles, sin embargo, con un gran radicalismo nacionalista. Un enfrentamiento con Arzallus, en cuyo programa figuraba la modernización de las estructuras del partido, se originó por la resistencia que opusieron a los intentos del actual presidente de atemperar los criterios estrictamente confederales que regían el funcionamiento del PNV desde su fundación. También por su resistencia a modificar las normas que establecían una rígida incompatibilidad de cargos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_