El INH invertirá 110.000 millones de pesetas en 1982, la mayoría en prospección y exploración de hidrocarburos

El plan de inversiones del Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH) para 1982, según manifestó ayer su presidente, Claudio Boada, totaliza 150.000 millones de pesetas, de los que excluyendo unos 40.000 millones en amortizaciones y financiación, el resto serán inversiones efectivas. Por otro lado, Boada añadió que el INH, una vez que el Parlamento aprobara el pasado martes la ley de creación del Instituto, dispone de los instrumentos para ser "perfectamente manejable".

El Instituto Nacional de Hidrocarburos, grupo que engloba a las siete empresas de los subsectores del petróleo y gas, fue creado el pasado 24 de abril por medio de un decreto ley. Sin embargo, el Gobierno decidió enviar a las Cortes un proyecto de ley, ahora ya aprobado, que una vez haya sido ratificado sustituirá al decreto.En el proceso legislativo, este proyecto de ley ha experimentado algunas importantes modificaciones que, según explicaron ayer Boada y su vicepresidente, José María Amusátegui, en una reunión informativa, afectan a tres campos: distribución de beneficios, comportamiento como intermediario financiero y política de concesión de avales.

Así, el INH tendrá que traspasar al Tesoro el 50%, como mínimo, de sus beneficios, en lugar del 100%, lo que permitirá acumular unas reservas patrimoniales en los próximos años. En segundo lugar, el INH podrá actuar como intermediario financiero, lo que permitirá al holding atender mejor las necesidades financieras de sus empresas. Y, por último, el INH no tendrá que conceder avales al Instituto Nacional de Industria o a las empresas de este grupo, tema que había surgido al haberse desgajado algunas de ellas del Instituto industrial.

De los 150.000 millones de pesetas, aproximadamente, que el INH invertirá en 1982, unos 110.000 irán destinadas a realizaciones concretas, mientras que unos 40.000 se destinarán a amortizaciones y reposiciones financieras. La "parte del león" corresponderá a prospecciones y exploración de hidrocarburos, área donde Claudio Boada estima que está la clave de una mayor independencia energética en los dos subsectores en que actúa el grupo.

Con una inversión estimada de 40.000 millones de pesetas para esta actividad -unos 15.000 millones más que en 1981-, el presidente del INH considera que "aquí se va ir a tope". Las prospecciones y exploración se van a realizar en España y en el extranjero, a través de Eniepsa e Hispanoil, respectivamente. En el exterior, Hispanoil no sólo explora en los países del Golfo y norte de Africa sino que ha extendido su campo a Guinea Ecuatorial, Guatemala y otros países americanos.

En el área del refino, donde actuán otras dos empresas del grupo (Enpetrol y Petroliber), la inversión será algo menor en 1982, aunque incluye una cifra superior a los 70.000 millones de pesetas cuando todo el programa de reconversión y modernización se haya culminado. Por ejemplo, Enpetrol destinará 30.000 millones del FCC (fluid catalitic craking) de Puertollano y otros 30.000 millones a los dos visbreaking de Tarragona y Cartagena. Petroliber, por su lado, tiene su FCC ya a punto.

En petroquímica, la filosofía es ir hacía la fabricación de productos de mayor valor añadido, abandonado poco a poco en importancia la elaboración de materias primas como etileno y propileno.

En el subsector del gas está el proyecto de traer gas de Europa mediante la interconexión con Francia (tema ya considerado ayer por el Consejo de Ministros).