El agua de Lugo debe ser hervida antes de ser consumida

Los lucenses, al igual que los pontevedreses, tendrán que hervir el agua para consumo de la ciudad durante quince o veinte minutos antes de utilizarla, según una recomendación de la alcaldía de la capital, que justifica tal acción en base a que, «debido a las lluvias torrenciales que se han producido en las últimas jornadas, el agua de la traída aparece con abundantes materias en suspensión».

No obstante, esta justificación ha causado sorpresa en todos los sectores de la ciudad y no es compartida incluso por técnicos, quienes argumentan para ello, entre otras cosas, que las lluvias han sido más torrenciales en otras ocasiones, sin que afectasen al suministro de agua.

Por su parte, la Delegación de Sanidad reconoce también que el agua no reúne condiciones físico-quimicas, pero «desde el punto de vista bacteriológico no se ha aislado ningún germen».

La nota del Ayuntamiento de Lugo ha sido divulgada una semana después de que por amplios sectores de la ciudad se observase que el agua de la traída general presentaba un color parduzco.