Lluvias y vientos huracanados en el noroeste español
El tiempo generalizadam ente revuelto que ha dominado la Península Ibérica en los últimos días continuará al menos hoy y mañana, con posibilidad de lluvias abundantes en el noroeste peninsular, más dispersas en la mitad norte y muy aisladas en la mitad sur.Pero las bajas presiones amenazan con desaparecer en las próximas 48 horas hasta el próximo fin de semana, cuando se espera otro empeoramiento, en forma de borrasca procedente de la vertiente atlántica.
Mientras, ayer llovió con intensidad en numerosos puntos de la geografia peninsular, aliviando al menos la situación para la sementera y los pastos ganaderos en las regiones más duramente castigadas por esta prolongada sequía, calificada ya como «la sequía del siglo».
Por la intensidad de la lluvia caída ayer, destacaron los registros de treinta litros por metro cuadrado en Pontevedra; veinticinco, en Santiago, y veinte, en Monte Igueldo (San Sebastián). A última hora de la tarde soplaban fuertes rachas de viento del Oeste en numerosos puntos de España, llegando a los noventa kilómetros por hora en Oviedo.
Algunas zonas de San Sebastián permanecieron varias horas sin suministro eléctrico como consecuencia de las inundaciones en transformadores de Iberduero.
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La autopista Bilbao-Behovia, cortada por desprendimientos de tierras
Viene de primera páginaDesde la noche del viernes a mediodía de ayer se registraron sesenta litros por metro cuadrado en el observatorio de Igueldo, y otros tantos en el de Fuenterrabía. Los desprendimientos de tierras por las lluvias ocasionaron cortes en varias carreteras guipuzcoanas.
La autopista Bilbao-Behovia continuaba cerrada ayer tarde en el tramo comprendido entre San Sebastián y Zarauz, como consecuencia de los desprendimientos provocados por un intenso temporal de lluvias, según informa nuestro corresponsal Victorino Ruiz de Azúa.
En el aeropuerto de Fuenterrabía se registraron, entre la madrugada del jueves y la del sábado, más de 67 litros por metro cuadrado, aunque la mayor parte de las precipitaciones corresponden a la noche del viernes y las primeras horas del sábado.
Un desprendimiento de rocas y tierra, a la altura de Usúrbil, impidió el tráfico durante todo el día en el sector de la autopista que une la capital guipuzcoana con Zarauz, aunque a media tarde era posible circular sólo en dirección a Bilbao. La carretera nacional 634, de San Sebastián a Bilbao por la costa, también se encontraba cerrada al tráfico entre Zarauz y Zumaya, a causa de desprendimientos.
Durante la madrugada y la mañana de ayer los bomberos de San Sebastián efectuaron numerosas salidas, para solucionar inundaciones en sótanos y bajos de edificios. El río Urumea se encontraba desbordado a su paso por Hernani, dificultando la circulación por carreteras locales.
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