Críticas de UCD a Jordi Pujol en el debate del Parlamento catalán

El debate del Parlamento catalán sobre el discurso del presidente de la Generalidad, Jordi Pujol, registró ayer, como aspecto destacado, la crítica dirigida por el grupo de Centristas de Cataluña-UCD a Pujol y su Gobierno. Toda la jornada estuvo dedicada a la intervención de los distintos grupos parlamentarios, y la sesión terminará mañana con la discusión y votación de las resoluciones que aquéllos puedan presentar.

El diputado Antón Cañellas, en nombre de UCD, se refirió a la concertación autonómica, y contestó a los recelos mostrados por Pujol en el discurso del día anterior. «La autonomía», dijo Cañellas, «lejos de estar en peligro, ganará en recursos». El dirigente centrista calificó de inoperantes muchos de los departamentos y organismos de la Generalidad -citó el Consejo de Agricultura, la Consejería de Trabajo...- y acusó al Consejo Ejecutivo de extralimitarse en la contratación de funcionarios. También se lamentó de que la Generalidad y sus representantes utilizaran el autogobierno para ofrecer una visión de permanente enfrentamiento con la Administración central, reiterando que los pactos autonómicos no iban a disminuir el contenido de los estatutos de autonomía.En el terreno de la lengua, también se opuso al criterio que había expresado Pujol, señalando que la lengua catalana no está amenazada ni hay peligro alguno para ella. Se mostró partidario de potenciar al máximo el bilingüismo, y sostuvo que «hay muchos catalanes de origen que aman y sienten suya la lengua castellana».

El tema de la concertación estuvo presente a lo largo de todo el debate. Así, el representante de Esquerra Republicana -grupo que junto con centristas apoya al Gobierno de Convergencia y Unión-, Frances Vicens, pidió a Pujol que concretara si habría recurso de inconstitucionalidad contra determinados puntos de los pactos autonómicos.

La izquierda pide cambio de Gobierno

Socialistas y comunistas coincidieron en algunos puntos de sus críticas al contenido del discurso de Pujol, señalando principalmente el incumplimiento de compromisos contraídos con anterioridad por el Ejecutivo catalán, principalmente en el terreno de la lucha contra el paro, la crisis económica y la reconversión industrial. También coincidieron en señalar la debilidad del Gobierno de Pujol. Los socialistas pidieron un Gobierno de amplia base parlamentaria, y los comunistas un Gobierno de unidad, con representación de todas las fuerzas parlamentarias.Joan Reventós, secretario del PSC-PSOE, vino a decir en el curso del debate que los verdaderos problemas de Cataluña estaban en la propia composición del Gobierno de Pujol y no en temas como la concertación autonómica. Sobre este punto insistió en que los pactos, autonómicos entre UCD y PSOE no recortarían el Estatuto de Autonomía, y propuso formalmente a la Cámara un debate sobre la existencia de esta posibilidad. Reventós acusó al Consejo Ejecutivo de inhibirse ante temas como el decreto de reconversión del sector textil, que afectará en Cataluña a 200.000 trabajadores, y denunció una falta de coordinación entre las distintas consejerías de la Generalidad. Hizo mención también a una «pérdida de prestigio de Cataluña en el conjunto de España».

Por su parte, el secretario general del PSUC, el diputado Francesc Frutos, señaló que el discurso de Pujol había sido «el peor posible». Acusó a Convergencia de no tener un proyecto autonómico claro, y al Consejo Ejecutivo de abrir falsas expectativas. Reclamó un Gobierno de unidad, y señaló que Convergencia Democrática de Cataluña había claudicado de sus contenidos nacionalistas, sustituyéndolos por un radicalismo verbal.