Francia ganó el Premio Italia de producciones radiofónicas

Radio Francia ha conquistado en Siena, una vez más, el Premio Italia en la sección radio-música, con la obra de Michel Zbar La noche de Hércules. El Premio de la RAI, en la misma especialidad, fue otorgado a Una venganza musical, casi un melodrama radiofónico de Bruno Cagli, presentado por la Radiodifusión-Televisión Italiana.Entre las obras que contaron a la hora de las últimas discusiones del jurado figura Cartas de amor a Colombina, original de Pablo Rivier, producida por RNE, que será aludida en la información de los primeros resultados del Premio Italia 1981.

La participación en radio-música ha sido menor este año en cuanto al número y duración de las obras y, probablemente, más baja en calidad media general. Sólo catorce obras, procedentes de doce países, han acudido a la convocatoria de Siena, en tanto los autores de guiones dramáticos y documentales han presentado veintiocho y treinta realizaciones, respectivamente.

Si el nivel medio a que nos referíamos debe entenderse desde el punto de vista de la invención, todo lo referente a la realización ha sido de gran categoría. Quizá fue esta la razón principal que decidió al jurado la concesión del premio a Radio Francia, pues en La noche de Hermes se despliegan las más amplias posibilidades técnicas, incluidas las electroacústicas del Conservatorio Nacional de Boulogne.

Michel Zbar (Clermont-Ferrand, 1942), discípulo de Messiaen, cuenta con experiencia en el campo musical, en el radiofónico y en el de la investigación electroacústica. Su obra -un cuento simbólico inspirado en la búsqueda alquímica- está cargada de poesía, tónica que se transmite desde el texto a los elementos musicales de todo orden, con precisión de lenguaje y gran belleza sonora. Pero, sobre todo, se advierte, desde el primer momento, que estamos ante una obra bien hecha.

Una venganza musical, de Cagli, procede de un cuento original publicado en 1967, cuyas características se prestan a un ingenioso y eficaz juego radiofónico. Se trata de la historia de un flautista (Severino Gazzelloni en la realización premiada) que se sirve del poder musical de la flauta para castigar la traición de su mujer. El carácter protagonista de la flauta (otro yo del marido engañado) se une a la recitación y el canto en un intento de renovar, en el medio radiofónico, el viejo concepto del melodrama.

Bruno Cagli, autor teatral, musicógrafo, poeta, sabe unificar en una unidad de concepción y en una alegría de estilo los diversos componentes de su obra, brillante y rica de sorpresas.

En cuanto al español Pablo Rivier, poeta, compositor, hombre de radio, extrae de una serie de poemas -Cartas de amor a Colombina- consecuencias analíticas y creativas para conseguir, según su propósito, una eficaz comunicación en el sentido acústico y en el social.

Este término, ligado al fondo sustancialmente lírico de Rivier, puede chocar y, sin embargo, la comunicación se establece desde los primeros momentos apoyada en hallazgos tan felices como la utilización de las campanas o las referencias verbales al suceso.