Alphonse Bugler
es el equilibrista que el pasado domingo batió la marca mundial de altura en cuanto a ejercicios acrobáticos. Los ejercicios los realizó en el parque de atracciones del Tibidabo, de Barcelona, a 65 metros de altura sobre el suelo, la mayor alcanzada hasta ahora por el hombre para esta clase de acrobacias. Para conseguir la marca, que ha sido homologada por el correspondiente organismo internacional, ha sido necesario acopiar un mastil cimbreante de quince metros a la atalaya del parque, que alcanza ya los cincuenta metros. Además de la considerable altura en que Bugler realizó sus ejercicios acrobáticos hay que añadir el soporte oscilante sobre el que fue atado el cable sobre el que fueron hechas las contorsiones, que puso aun más difícil el logro de la marca mundial.
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