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Cierre semanal incierto

La pasada semana ha presentado un balance claramente contradictorio, que representa el resumen de un cielo incierto que comenzó con unas sesiones boyantes claramente orientadas al alza, como correspondía a la herencia de las reuniones precedentes, para terminar cerrando dentro de un ambiente tenso y expectante, en el que los compradores interrumpieron bruscamente su actividad, mientras que las órdenes de venta se multiplicaron con rapidez.La condición de última semana del mes de agosto, la incertidumbre despertada en cuanto a las posturas que adopten los inversores a la vuelta de las vacaciones estivales, y sobre todo las realizaciones de los beneficios acumulados a lo largo de las últimas reuniones, han sido las causas que han originado el cambio en la orientación positiva de los mercados de valores. No obstante, después de concluir las operaciones del pasado viernes, la presión que ejercían los vendedores no llegaba a ser asfixiante, si excluimos el sector siderometalúrgico, cuyos valores aparecían claramente afectados por «el mal de altura».

Debilidad del sector bancario

El grupo bancario, tradicional protagonista de innumerables reuniones, mantuvo a lo largo de la tanda un tono gris, apenas salpicado por los destellos del Banco Popular, la única entidad que a diario consiguió atraer a los compradores. El resto de sus compañeros de sector se mantuvieron en posiciones similares a las del cierre de la semana anterior, en base, casi siempre, a complicados ejercicios de prestidigitación, tendentes a crear un clima de calma que de alguna manera desacreditaban esas 100.000 acciones a la venta, que sumaban a diario los principales representantes del grupo.

Tampoco las eléctricas dieron el juego que se esperaba de ellas. En esta ocasión fueron las severas restricciones compradoras quienes afectaron a los valores integrados en este grupo, ya que la oferta sólo constituyó una amenaza apreciable para algunas acciones concretas, precisamente aquellas que tienen unos precios más altos.

Las químicas, y los valores del sector de inversión también se vieron afectados por la falta de interés de los compradores, aunque en este caso sí se pudieron apreciar órdenes vendedoras de alguna importancia, que hicieron flexionar a la baja los precios de un buen número de las acciones de estas sociedades.

Expectación para la próxima semana

Para la próxima semana, casi todos los especialistas apostaban por unas sesiones iniciales dubitativas, en las que es posible que se mantenga el predominio de la oferta, al continuar los compradores a la espera de una definición de la tendencia del mercado, para dar paso, salvo imprevistos, a un cierre semanal orientado al alza, donde las subidas volverán a dominar.

Los imprevistos, temidos por los especialistas, pues de alguna manera vendrían a romper sus esquemas de actuación, podrían venir dados por la aparición, de órdenes vendedoras masivas, cuyo origen fuesen las realizaciones de beneficios de quienes se tomaron absolutamente en serio aquello del descanso veraniego. En cualquier caso, esta posibilidad está siendo escasamente contemplada por los expertos.

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