Los Renault saldrán, una vez más, en cabeza
El Gran Premio de Holanda de Fórmula 1 que se disputa hoy en el circuito de Zandvoort, podría despejar algo las dudas sobre el posible ganador del título mundial de esta temporada. Cuando faltan, con la de hoy, sólo cuatro carreras para que termine el campeonato, el argentino Carlos Reutemann, actual líder de la clasificación; el brasileño NeIson Piquet a seis puntos de diferencia, y el francés Jacques Laffite, a once del primero, parecen ya los únicos candidatos posibles al título.El circuito de Zandvoort está situado en unas dunas, muy próximo al mar. Es uno de los trazados considerados como rápidos. Por eso, la ventaja de los turboalimentados frente a los de aspiración tradicional favorece a los Renault y a los Ferrari. El problema para los amarillos coches franceses es su falta de robustez. Son capaces de conseguir una vuelta muy rápida y dominar la parrilla de salida pero después la fragilidad de algunos de sus elementos les fuerza a una retirada prematura de la prueba o a una pérdida grande de su eficacia potencial. Y por lo que respecta a los rojos Ferrari italianos, su mal está en la estructura chasis menos estable que los de la mayoría de sus adversarios, y en su falta de manejabilidad. Difícilmente alguien que no sea un autentico fenómeno, como es el caso del pequeño canadiense Gilles Villeneuve, podría pilotar actualmente un Ferrari y llevarlo al triunfo como es capaz de hacerlo él.
En esas condiciones, el dominio inicial de los Rertault puede terminar en victoria solo si los coches soportan el tremendo esfuerzo al que sus dos pilotos, Alain Prost y René Arnoux, los someterán esta tarde. Si una vez más se rompen, el triunfo puede entonces dirigirse entre el Talbot de Laffite, cada día más competitivo y con su piloto -otro de los mejores del circo- más en forma, el Brabham del brasileño Nelson Piquet y los Williams de Alan Jones, actual campeón del mundo y Carlos Reutemann, líder de la clasificación provisional del mundial. A este reducido grupo de aspirantes a la victoria en el Gran Premio de Holanda habría que añadir al británico John Watson, cuyo McLaren ha logrado en esta fase de la temporada una puesta a punto que te permite estar siempre en condiciones de aspirar al primer puesto. Todo lo que no sea una victoria de uno de éstos debería conside rarse como una auténtica sorpresa, y podría servir para mantener la emoción sobre el resultado final del campeonato durante algún tiempo más. Pero, de rodar las cosas normalmente, la lucha entre Reutemann, Piquet y Laffite, con independencia del puesto que ocupen, puede ser decisiva de cara al título. Si el francés no logra meterse en los prirneros puestos, sus aspiraciones quedaran ya muy reducidas, por lo que él debería ser el que, de los tres, tendría que forzar más.
