El duque de Suárez lee y descansa en Avila
El duque de Suárez, acompañado de su familia, se encuentra pasando, sus primeras vacaciones estivales desde que dimitió de la Presidencia del Gobierno en su chalé-palacio situado en la calle de los Telares, en la capital abulense. EL PAIS ha tratado de ponerse en contacto con él en numerosas ocasiones sin conseguirlo; sin embargo, una persona que se identificó como miembro de su escolta manifestó a los representantes de este periódico que Suárez dedicaba estos días "a leer , descansar y ver a sus amigos".Los duques de Suárez se trasladaron a su residencia de Avila en la segunda quincena del pasado mes de julio. El ex presidente del Gobierno simultaneó sus vacaciones con algunos viajes a Madrid para resolver asuntos pendientes en su despacho de la calle de Antonio Maura. Posteriormente tuvo que interrumpir sus días de descanso para asistir en calidad de representante oficial al entierro del presideríte de Panamá, Omar Torrijos, muerto en accidente de aviación.
En fuentes próximas al palacio de la calle de los Telares se ha señalado a EL PAIS que el duque de Suárez dedica su tiempo al descanso, a la lectura, a jugar a las cartas y a recibir visitas de sus amigos. Entre estos últimos destaca Fernando Halcón, diputado por Avila y amigo íntimo del presidente honorario de UCD desde su tierna infancia, que también le sirve de filtro de llamadas y visitas. Se le ha visto poco por las calles abulenses y las veces que ha salido ha sido para asistir a misa y para visitar a viejos amigos, y siempre acompañado por su ángel de la guarda, el antes citado Fernando Halcón. La mayor parte de su tiempo la pasa en su chalé, que está adosado a la muralla y situado a un paso de la iglesia de la Santa y del Palacio de Justicia, por lo que ya ha sido incorporado como elemento fundamental en las rutas turísticas de la capital. EI chalé está construido con piedra y fue diseñado por el arquitecto Carlos Picardo, mientras que el director de las obras fue el también arquitecto Pedro Resina, miembro cualificado de la UCD vallisoletana, pero que en Avila ha chocado repetidas veces con sus compañeros de partido. Dispone de un garaje de sesenta metros cuadrados, una planta baja de 360 y otra planta alta de 336. Las terrazas ocupan 140 metros cuadrados, y la buhardilla, setenta.
En la planta baja se encuentran el zaguán, vestíbulo, salón comedor y un despacho. También está el área de servicio, donde se encuentra la despensa, office, cuarto de plancha y una habitación. En la planta alta se hallan el cuarto de estar, dos habitaciones para huéspedes, tres habitaciones con baño y un cuarto para jugar. La obra costó alrededor de treinta millones de pesetas.
Hasta el momento no ha realizado actividades políticas, al menos de forma ostensible. Sin embargo, a algunas personas que le han visitado les ha señalado que necesita gente fiel y no críticos. Por otro lado, durante la reciente campaña electoral de la asamblea provincial, realizó algunas llamadas telefónicas para pedir el voto a la candidatura encabezada por Alberto Dorrego y en la que estaban incluidos el cuñadísimo Lito, siempre moviendo los hilos en la oscuridad, y el director de la Seguridad del Estado, Francisco Laina, además de su hermano Ricardo.
Hasta el momento no ha salido con frecuencia a pueblos de la provincia, tan sólo a Burgohondo, feudo de Lito, y donde un hermano de éste ejerce como alcalde. Allí, acompañado de los citados anteriormente, a los que se unieron Fernando Halcón y el presidente de la Diputación, presenció un festival folklórico que se prolongó por espacio de tres horas, durante las cuales se mantuvo de pie en el balcón del Ayuntamiento.
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