"Fidecaya ha frenado una situación de difícil control" según su presidente, Edmundo Alfaro
Pese al temor manifestado por la dirección de Fidecaya de que se produjera una cierta desbandada de depositantes tras la afirmación, en otras publicaciones, de que las acciones de la entidad estaban embargadas, las demandas de transferencias para acusar reintegros ascendieron ayer a cien millones de pesetas, según fuentes de la sociedad. «La solidez de Fidecaya ha frenado una situación de difícil control», declaró anoche a EL PAIS su presidente, Edmundo Alfaro.En la sede central de Fidecaya se recibieron durante la jornada de ayer, considerada crítica tras la publicación en algunos medios del embargo de acciones de la sociedad, demandas de transferencias para acusar reintegros de depositantes que no superaron los cien millones de pesetas. Según Edmundo Alfaro, «en una entidad de unos recursos ajenos del orden de los 17.000 millones de pesetas esta cifra es normal».
El número de depositantes de Fidecaya asciende a 248.000, aproximadamente, y su pasivo era, a 31 de julio último, de 16.750 millones de pesetas. Fidecaya dispone de 340 oficinas y 6.000 delegados,.
Fidecaya, una de las mayores y más populares entidades de ahorro y capitalización, trabaja un producto denominado cédula de ahorro premiado. El impositor escoge la cantidad y la paga al contado o mediante un plan de ahorro prefijado. La entidad, desde la firma de la cédula, le ofrece diez talones para que el depositante reintegre la cantidad total a voluntad . Estas cédulas tienen un interés del 7,25 % y 8,25%, y participan en un sorteo mensual por el cual dos de ellas se duplican y otras diez se incrementan en una décima parte.
Fidecaya fue adquirida el pasado mes de mayo por Edmundo Alfaro. Desde entonces, el pasivo de la entidad sufrió varios altibajos. En el mismo mes de mayo, según fuentes de la entidad, el pasivo disminuyo en ochenta millones de pesetas; en junio el descenso fue de 121 millones. En julio, una fuerte campaña de publicidad, y la convención de delegados que la sociedad realizó en Benalmádena (Málaga) favorecieron un incremento del pasivo en 256 millones.
Mentís oficial al embargo
La Dirección General de Seguros difundió el pasado domingo una nota en la que ratificaba que Fidecaya, SA, no figura como demandada en el procedimiento de demanda formulado por el grupo Hilders contra Cemesa, sociedad de la que es presidente Alfaro.La nota dice que, por comunicación dirigida a dicha Dirección General por el juzgado, «consta que los bienes objeto del embargo preventivo son los derechos del puerto deportivo de Benalmádena, así como los derechos de propiedad que puedan corresponder a Cemesa sobre los terrenos ganados al mar y construcciones eventualmente existentes en dicho puerto y en su complejo inmobiliario ».
La nota añade «que, por la misma razón, consta a dicha Dirección General que Fidecaya, SA no figura como demandada en el referido procedimiento judicial ni sus acciones han sido objeto de embargo en el mismo».
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