Cinco heridos en un aparatoso accidente de "metro" en la estación de Menéndez y Pelayo

Cinco personas resultaron levemente heridas al chocar a mediodía de ayer dos trenes de la red del metro madrileño en la estación de Menéndez y Pelayo. La colisión se produjo, al parecer, por defecto en el funcionamiento del mecanismo de los frenos del convoy que llegó a la estación mientras se encontraba detenido en ella otro tren. Ambos eran de los más antiguos en servicio con que cuenta el Metropolitano madrileño.

Tras el choque quedaron esparcidos por el andén trozos de cristales de las ventanillas de los vagones. Un empleado que se encontraba. en el tren que sufrió el impacto comentó a este diario que el choque fue tan intenso que incluso hizo saltar sistemas de alarma, cuyas manivelas quedaron diseminadas por el suelo. El mismo empleado consideró milagroso que se hubiera salvado el conductor del segundo tren, que seguía trayecto hacia Vallecas desde Atocha. Este, Adrián Moreno Ballesteros, que resultó herido, trató de detener su tren al observar que en el trayecto, inmediatamente antes de entrar en la estación Menéndez y Pelayo, se mantenía encendida la luz roja en los indicadores de tráfico. Pero los frenos no respondieron.Tras producirse el choque, a las 12,35 horas, los cinco heridos, tres adultos y dos niños, fueron trasladados a la clínica del Niño Jesús, Hospital Provincial y clínica del Metro, en Ventas. Todos los pasajeros, incluidos los heridos, abandonaron los trenes por su propio pie. Los médicos sólo apreciaron contusiones carentes de importancia. Es de destacar la rapidez con que reaccionaron los servicios de Policía Municipal, sanidad y bomberos, que desplazaron al lugar importantes efectivos asistenciales y técnicos aun antes de conocerse las proporciones del choque y el número de heridos.

Entre los factores que parecen haber incidido favorablemente en el hecho de que el número de heridos no haya sido más elevado se cita el de que los vagones iban prácticamente vacíos. A las 13,00 horas, la estación de Menéndez y Pelayo quedó desalojada. Poco después se iniciaban las correspondientes maniobras para remolcar los dos trenes dañados hacia los talleres. La compañía del metro difundió ayer, tarde una nota en la que, tras asegurar que los sistemas luminosos de seguridad funcionaron perfectamente, y que habían sido revisados el pasado 16 de julio, anticipaba que se procedía a examinar el material móvil. Los heridos, además del conductor del segundo convoy, viajaban en el último vagón del primer tren, que lógicamente, fue el que sufrió más las consecuencias del impacto. Sus nombres son, según se ha facilitado oficialmente, los siguientes: Susana Martín Chacón, de cinco años: Juan Luis Pelayo Pastor, de siete; María del Carmen Manzanedo, de 43 años, y Alfonso Moreno, de 53. El servicio en la línea afectada estuvo interrumpido hasta últimas horas de la tarde.