Acuerdo entre el Gobierno polaco y Solidaridad sobre el racionamiento de la carne
El Gobierno polaco y Solidaridad han llegado a un acuerdo sobre el sistema de racionamiento de la carne, pero algunas ramas del sindicato no aceptan la reducción de las raciones de 3,7 a 3 kilos por persona y mes y continúan realizando manifestaciones de protesta en diversas ciudades del país.
El acuerdo fue concluido en la noche del lunes, y en él se contempla la limitación del racionamiento al mes de agosto. El jefe de la delegación sindical que ha discutido con el Gobierno los términos del pacto, Stanislaw Rusinek, declaró que las propuestas gubernamentales han de ser aún ratificadas por la instancia suprema de Solidaridad y por los afiliados al sindicato.El Gobierno, que se ha comprometido a informar antes del 15 de agosto sobre la posibilidad de volver en septiembre a las cantidades actualmente en vigor, concederá a los trabajadores que desempeñen actividades especialmente duras cuatro kilos de carne mensuales.
Rusinek también especificó que la delegación gubernamental pedirá al Consejo de Ministros que conceda compensaciones para que las restricciones del mes de agosto sean recuperadas en los meses venideros.
A pesar de este principio de acuerdo, los observadores no dejan de notar que la dirección nacional del sindicato independiente tendrá que contar con unas bases exasperadas por la decisión gubernamental, de la que reclaman su pura y simple anulación.
10.000 manifestantes
El descontento popular ante la escasez sin precedentes se hace evidente en las continuas manifestaciones que se suceden por todo el país, especialmente en el centro y en el Sur. En Lodz, segunda ciudad polaca y capital textil del país, unas 10.000 personas siguieron ayer la manifestación de vehículos que recorrió la principal arteria de la ciudad para protestar contra la falta de provisiones. Medio centenar de autocares y varias decenas de camiones y furgonetas repitieron la escena del lunes: avanzaron a marcha lenta y con los faros encendidos antes de detenerse durante tres minutos ante el Ayuntamiento haciendo sonar sus bocinas.Los 10.000 polacos que siguieron a los vehículos durante todo el recorrido aplaudían y gritaban consignas tales como "Viva Solidaridad", "No nos dejaremos morir de hambre" o "Cuidado, un pueblo hambriento puede devorar a sus gobernantes". Para mañana está prevista una manifestación de mujeres y niños, que será la segunda marcha del hambre que conozca la Polonia popular.
En el sur del país, en Czestochowa, la rama local de Solidaridad anunció que hoy realizaría una huelga de advertencia si el Gobierno no retira la nueva restricción, y mostró su discrepancia con el acuerdo Gobierno-Solidaridad que, según ella, había sido decidido en la central sindical de Gdansk sin consulta previa con las otras ramas del sindicato.
La Prensa polaca se muestra muy pesimista sobre las perspectivas inmediatas de la economía al dar a conocer los resultados económicos del primer semestre del año, que muestran descensos en todos las áreas, excepción hecha de los salarios.
