Debilidad generalizada de la economía española en los primeros meses de 1981

La economía española en el primer trimestre de este año se ha movido en parámetros muy negativos, y las expectativas de una sustancial mejora a corto plazo son débiles e irregulares, según el último informe de coyuntura elaborado por la CEOE. Los expertos de la CEOE, que no recogen en su estudio previsiones para el primer semestre, coinciden, sin embargo, con otros coyunturalistas (véase EL PAIS de los días 1 y 3 de este mes) en destacar como datos especialmente negativos la evolución del déficit del Estado y de las exportaciones, así como la resistencia de los precios a la desaceleración.En los primeros días de julio, algunos expertos adelantaron la posibilidad de un crecimiento cero, e incluso negativo, de la economía española durante el primer semestre. Juicios que fueron refutados por el Ministerio de Economía, que afirmó que no se disponía de datos suficientes todavía para aventurarse a hacer tales pronósticos.

Según el estudio de la CEOE, el déficit del Estado se situó en el primer trimestre en 243.714 millones de pesetas (aumento del 53%), el déficit exterior en términos de registro de caja ha crecido un 77% (en pesetas, un 12 1 %, por el efecto de la devaluación de la peseta frente al dólar); los precios siguen con tendencia alcista, por el comportamiento del grupo alimentarlo, que se come la desaceleración de los otros componentes, y el paro en el trimestre llegó al 13,5% de la población activa.

Pese a todo ello, el informe de la CEOE señala que algunas de estas variables quedarán afectadas favorablemente a corto plazo por el acuerdo nacional de empleo. En todo caso -afirma-, el proceso de mejora será lento y no exento de altibajos.

En el capítulo de análisis de la actividad productiva, para el sector agrario las previsiones (no se da ningún avance del trimestre) que se citan son las oficiales, se habla de una reducción del 2% de la producción final agraria, por el impacto de la sequía, en cereales sobre todo.

En los datos de producción industrial, hecha la salvedad del fuerte retraso con que están apareciendo los datos estadísticos, se observa el comportamiento negativo. El informe cita el aumento del consumo de energía eléctrica en sólo un 0,37% el primer trimestre, frente al 5,1% del mismo período del año 1979.

El consumo de fuel (aumento del 6,8% en tasa anual en el primer trimestre, frente al 15,9% en 1979) confirma la atonía en la industria. Las encuestas mensuales de industria dan una visión más optimista. comparadas con el primer trimestre de 1980, pero, sobre todo, en bienes de inversión con niveles de producción y tendencia que indican recuperación en los próximos meses.

En construcción, pese a las expectativas del plan trienal de vivienda, no se ve la actividad recuperada. El consurno de cemento sigue bajo (-8,1%), la licitación oficial se redujo un 2,4%, la construcción residencial privada, el l6,9%; las viviendas proyectadas disminuyeron el 21,3%, y el paro aumentó el 15,2%.

En servicios se registra una clara recesión. El transporte aéreo de viajeros ha caído el l2,3%; el de mercancías, el 6,4%, y el número de visitantes, el 9%.

En la evolución de la demanda, el informe de CEOE se remite a la encuesta de coyuntura de economía, que registra un nivel de cartera de pedidos más deprimido que en 1980 en igual período. También resulta indicativo, en cuanto al descenso del consumo, la caída de matriculación de turismos en un 10,8% en los tres primeros meses, y el consumo de gasolina (-2,3). En cuanto al consunio público, los gastos corrientes del Estado crecieron el 21 % sobre el mismo período de 1980.

El déficit corriente de la balanza de pagos continúa creciendo, situándose en 2.391 millones, y en abril era ya de 1.590 millones de dólares. El sector exterior registra una fortísima contracción exportadora (del 25%) y una reducción importante de importaciones (15%).

En cuanto al sector público, aumentó la necesidad de financiación en el primer trimestre de 1981 en 1,3 veces sobre el año anterior.

La economía española en el primer trimestre de este añe, se ha movido en parámetros muy negativos y las expectativas de una sustancial mejora a corto plazo son débiles e irregulares, según el último informe de coyuntura elaborado por la CEOE. Los expertos de la organización empresarial coinciden en destacar como características negativas en la evolución de nuestra economía: el déficit del Estado; la contracción de las exportaciones, pese a la continua devaluación de la peseta con respecto al dólar, y la resistencia a la desaceleración del crecimiento de los precios. Factores todos ellos que han llevado a otros coyunturalistas a adelantar una tasa de crecimiento cero e incluso negativo para el primer semestre.