Ofensiva política para estabilizar la situación en Irán

Los dirigentes iraníes lanzaron ayer una importante ofensiva política, dirigida a preservar la estabilidad de la República Islámica, tras el atentado del pasado domingo, en el que 74 importantes miembros del partido gubernamental perdieron la vida.El máximo dirigente religioso iraní, el ayatollah Jomeini, pidió ayer la participación activa del clero chiita en las próximas elecciones presidenciales, previstas inicialmente para el 24 de julio. «Si no participáis», aseguró el guía de la Revolución, «Irán corre el riesgo de tener un presidente impuesto por Estados Unidos o la Unión Soviética».

Por otra parte, el nuevo hombre fuerte del régimen de Teherán y sucesor de Bejesti, el hojatoleslam Mohamed Bahonar, dijo que todas las organizaciones políticas que acepten la revolución islámica podrán concurrir a las elecciones presidenciales, informa el enviado especial de EL PAÍS en Irán, .

Declaraciones similares de otros altos dirigentes islámicos parecen confirmar la búsqueda de una solución pragmática para la grave crisis actual por parte de los líderes iraníes. Mohamed Bahonar excluyó explícitamente a los grupos armados de su oferta de participación política. En el Parlamento iraní, los diputados lloraron a sus compañeros muertos en el atentado del domingo y gritaron estruendosamente «¡Muerte a América!». El atentado del domingo, que causó la muerte a veintisiete diputados, ha creado problemas de funcionamiento al Majlis.

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