La Federación investiga presuntas irregularidades arbitrales

Una amplia investigación sobre presuntas irregularidades cometidas en determinados partidos de esta Liga podría resultar frustrada al haber sido filtrada a la Prensa una carta del árbitro valenciano Fandos al Comité Nacional, según la cual fue objeto de un intento de soborno. En la Federación Española se trabaja sobre la posibilidad de que dos marcas de material deportivo estén implicadas en esas presuntas irregularidades, de las que se comenzó a sospechar después del partido Valencia-Valladolid.El encuentro Valencia-Valladolid concluyó con empate, resultado que fue una fuerte sorpresa. A la jornada siguiente, el Valencia perdió en Almería. El presidente valencianista realizó unas declaraciones por las que aseguró que, frente a su equipo, el Valladolid contó con «prima de un tercero». Se mencionaron los nombres de los jugadores Fenoy, del Valladolid, y Felman, del Valencia, como fuentes de esa información. Estos dos jugadores fueron citados y prestaron declaración ante el Comité de Competición. De las declaraciones de los jugadores no trascendió detalle aIguno y se aseguró que no se comprobó irregularidad alguna.

Pero, según parece, Fenoy proporcionó un detalle en principio insignificante. El jugador argentino del Valladolid llegó a comentar, que una determinada marca de material deportivo estaba dispuesta a firmarles a todo su equipo un buen contrato si puntuaban en Valencia. Se asegura que el presidente del Valladolid prohibió a sus jugadores entrar en contacto con esa marca de material deportivo.

La alerta definitiva se produjo cuando llegó a la Federación Española la información del escrito que Fandos redactó después de anunciar a Plaza -presidente del Comité Nacional de Arbitros- de los hechos que le sucedieron. Fandos, dos días antes de su viaje a Gijón para arbitrar el Spórting-Atlético de Madrid, recibió en el contestador automático de su teléfono un aviso insistente del ex árbitro, también valenciano, Segrelles, que tenía mucho interés en hablar con él. Cuando Fandos se comunicó con Segrelles, éste le dijo que posiblemente le interesase una oferta de material deportivo de la casa Puma. Segrelles, se asegura, colabora con el Atlético de Madrid en ojear jugadores de la región valenciana que pueden interesar al equipo madrileño. Además, entre otros asuntos, se encargó de proporcionar al Atlético de Madrid aquellos objetos de joyería con que éste contó para conmemorar su 75 aniversario, hace pocos años. Segrelles, sin ser internacional, y con Pardo Hidalgo, ex presidente de los árbitros, jefe de personal del Atlético, dirigió la final de la Copa del Generalísimo que el equipo madrileño ganó al Zaragoza en 1976. Todavía se recuerda a Segrelles aquel gesto de echarse las manos a la cabeza al señalar por error un fuera de juego en contra del Atlético en el Manzanares.

Fandos asegura, en su escrito, que Segrelles le mencionó el nombre de Héctor Núñez, secretario técnico del Atlético de Madrid y representante de la casa Puma en Valencia, así como también que le llegaron a ofrecer un millón de pesetas por ese contrato publicitario que le Indicaron. Fandos debió notar algo raro y se lo comunicó a Plaza, al mismo tiempo que le insinuó la posibilidad de que fuese sustituido en el Spórting-Atlético de Madrid. Desde la Federación Española llegó la indicación de que Fandos no fuera sustituido y que redactase un escrito contando todos los detalles.

La Federación Española intensificó entonces los campos de su investigación y esta llegó hasta el propio Fandos, pese a que esto ya se realizó la pasada temporada y no se descubrió nada. Fandos dirigió el partido Málaga-Rayo Vallecano de la pasada temporada. El encuentro finalizó con victoria del Rayo por 4-1. Se produjeron incidentes de tal gravedad que las vallas del campo malagueño fueron derribadas en parte, y La Rosaleda, clausurada. El presidente del Sevilla también indicó la posibilidad de presuntas irregularidades en el partido que su equipo disputó la pasada temporada en Salamanca y que dirigió este colegiado.

La Federación Española lleva sus investigaciones en el más completo secreto. No se descarta la posibilidad de que una vez concluida la temporada se den a conocer públicamente los resultados, así como de las consecuencias que de las mismas se deriven.