Casaus confirmó los contactos con los secuestradores

El Barcelona llegó ayer por la tarde a Madrid para jugar hoy en el Manzanares, frente al Atlético, sin medidas especiales de vigilancia. Poco tiempo después de su llegada, los dire¿íivos del Barcélona que viajaron, y Helenio Herrera, su entrenador, celebraron una conferencia de Prensa. El entrenador azulgrana facilitó el equipo que presentará el Barcelona. Sobre el secuestro, Nicolau Casaus, curiosamente, declaró lo contrario de toda la semana, pues siempre había obviado las posibles negociaciones con los secuestradores.Unos 6.000 aficionados azulgranas presenciarán hoy el partido entre el Atlético y el Barcelona. Este elevado número de aficionados obligó a que el club azulgrana cambiase su hotel de residencia en la capital de España. El vicepresidente del Barcelona declaró que los jugadores y la directiva no quisieron, en principio, jugar el partido. «Pero los especialistas en secuestros», aseguró Casaus, «nos aconsejaron disputar el encuentro. La irectiva no forzó a los jugadores a actuar, pero creemos que es lo mejor que pueden hacer» .

Nicolau Casaus aseguró además que el Barcelona pagará la cifra que digan los secuestradores de Quini. «En toda España existe la mentalidad», indicó el vicepresidente azulgrana, «de que hay que dar lo que sea, cueste lo que cueste, en sacrificio de la vida de Quini. En un tema humano como este no regateamos esfuerzos. Estamos pendientes de cualquier circunstancia que concrete la forma de pago del rescate».

Este puede ser el último capítulo que reste para resolver satisfactoriamente el secuestro de Quini. Helenio Herrera, por su parte, sobre este punto, indicó que se está de acuerdo con el dinero a pagar y que el club azulgrana quiere inmediatamente se devuelva al jugador, mientras los secuestradores solicitan un poco de tiempo para ello.

El vicepresidente azulgrana se negó a contestar si había contactos o no con los secuestradores e indicó que no se atrevía a asegurar que el despliegue informativo sobre el secuestro de Quini había retrasado su solución. «El Barcelona ha actuado lo mejor posible», declaró. Todas las informaciones que aseguran cualquier control sobre el secuestro han perjudicado su solución. Los raptores son unos delincuentes comunes. Es un tema delictivo. Su mercancía es Quini y lo tienen que vender. Para ello tienen que encontrar el momento oportuno. Cuantos menos motivos se den para alertar a los raptores, favoreceremos la solución del caso».