Las guarderías, contra las exigencias de varios ayuntamientos del cinturón de Madrid

La Asociación Nacional de Guarderías infantiles (Asnaguín) ha propuesto la negociación de un convenio nacional para esta clase de centros y la regulación de su actividad dentro de la Administración. Asimismo, solicitan que sean reconsideradas las ordenanzas sobre funcionamiento de escuelas infantiles establecidas por varios municipios del cinturón industrial de Madrid, que según Asnaguín, sobrepasan las facultades de los ayuntamientos e invaden parcelas correspondientes a varios departamentos ministeriales.La Asociación Nacional de Guarderías Infantiles se constituyó el pasado 5 de julio de 1980, con el fín de constituir un grupo que logre la firma de un convenio a nivel nacional, con el cual se eviten esta clase de ordenanzas, que de cundir el ejemplo en otros municipios podrían producir el despido colectivo de 45.000 personas encargadas en la actualidad del trabajo en las guarderías.

Según señalaron en una conferencia de Prensa representantes de esta asociación, en los ayuntamientos de Móstoles, Getafe y Leganés se han establecido unas ordenanzas para el funcionamiento de guarderías que exigen que dirección y personal pedagógico recaiga en titulados en psicología, pedagogía y profesores de Educación General Básica, y que el personal de atención directa a los niños esté constituido por maestros. Para conseguir,el cumplimiento de estas normas, los ayuntamientos citados dan un plazo de dos años de adaptación.

Asimismo, según la asociación de guarderías, si se cumpliesen las exigencias a nivel de plantillas, el coste mensual de un niño que asista a una guardería supondría para el centro unas 25.000 pesetas.

Asnaguín señala también que hasta hace dos años el único requisito para abrir una guardería era la concesión de una licencia municipal y el visto bueno de la inspección de Sanidad. Desde entonces, señala la asociación, la apertura de guarderías se ve dificultada precisamente por la concesión de la licencia municipal.

En cuanto a la negociación del convenio, Asnaguín manifiesta que ha recibido la propuesta de un anteproyecto por parte de las centrales sindicales UGT y CC OO que calificaron de «inadmisible desde el momento en que denominaba a las guarderías escuelas infantiles, y establecía que cualquier persona que tuviese contacto con los niños se llamase educador», informa Efe.

Las conversaciones han quedado suspendidas hasta la celebración de la asamblea nacional que Asnaguín ha convocado para el próximo 6 de febrero y en la que se pretende, a través de las respuestas de todas las guarderías del país, conocer la representatividad de la asociación.

Fuentes de uno de los ayuntamientos que han establecido tal tipo de ordenanzas señalaron a EL PAIS que tales normas se han establecido ante la proliferación de locales que se autocalificaban de guarderías y sólo respondían a un local y unas personas para cuidar a niños que eran dejados allí por sus padres al tener que ausentarse de casa para acudir al trabajo. Según estas fuentes, lo que pretenden los ayuntamientos implicados es conseguir que se establezcan unas verdaderas escuelas infantiles con rigor pedagógico y no unos lugares de aparcamiento de niños