El divorcio de Irene de Holanda y Carlos Hugo, "una cuestión de tiempo"

El divorcio de la princesa Irene de Holanda y el político español Carlos Hugo de Borbón Parma, ex presidente del Partido Carlista, «es una cuestión de tiempo», según fuentes oficiosas cercanas a la corte holandesa. El servicio de Prensa del palacio real se negó, sin embargo, a realizar ningún comentario sobre el futuro de la pareja, y portavoces del Ministerio de Asuntos Exteriores recordaron que la princesa Irene no tiene estado de miembro de la familia real desde que se convirtió al catolicismo para contraer matrimonio con el príncipe español.Los problemas matrimoniales de Irene y Carlos Hugo despiertan un gran interés en Holanda, donde la Prensa les dedica grandes espacios. Irene, segunda hija de la reina Juliana, ha contado siempre con más simpatías entre los holandeses que su hermana, la reina Beatriz, y la Prensa «del corazón» le adjudica, desde hace años, el calificativo de «ojito derecho» de Juliana. La televisión holandesa recogió con todo género de detalles la afectuosa inquietud de Irene en los recientes actos de abdicación de su madre y la cariñosa correspondencia de la reina.

El interés de Juliana ante el futuro sentimental de Irene es patente desde hace meses, cuando empezaron a correr los primeros rumores sobre sus desavenecias conyugales. Según la Prensa holandesa, la familia real celebró este fin de semana un «consejo», en el palacio de Soest Dift, en el que reside Irene con sus hijos desde que abandonó Madrid. Juliana apoyaría los deseos de su hija.