Graves incidentes en Linares y Málaga

Cuatro equipos más de Primera División, Español, Murcia, Betis y Valladolid -que se unen así a Zaragoza, Osasuna y Las Palmas-, fueron eliminados ayer tras la segunda ronda de la Copa de España. La jornada, sin embargo, tuvo nuevamente un signo más extradeportivo que otra cosa, con graves incidentes en Linares y Málaga.En Linares, el árbitro debió suspender el partido a doce minutos del final, tras no pitar un penalti. El jugador almeriense Maxi sufrió una conmoción cerebral al recibir un botellazo -de los muchos objetos que cayeron al campo- en la cabeza. En Málaga, el autocar del Granada y coches con matrícula de esta ciudad fueron apedreados. La Policía Nacional debió lanzar bolas de goma para dispersar a los alborotadores. Por último, Canito, expulsado por agresión a un contrario, a los nueve minutos del partido Barcelona-Lérida, fue expedientado y apartado del equipo por aplaudir al público que le increpaba, primero, y realizar un corte de manga, después.

En el único partido entre dos equipos de Primera, Betis-Sevilla, de gran juego y emoción, marcó Diarte al minuto, y empató Yiyi tres después. El equipo de Muñoz resistió bien los ataques béticos.