Estacion de Robledo: cifras astronómicas
Inaugurada en julio de 1965, con el tiempo justo para recibir las históricas fotografías de Marte que transmitía el Marinero IV, la instalación de Robledo, asociada a la de Cebreros y dependiente del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), es uno de los tres nudos de la red de control de vuelos extraorbitales. Consta, en esquema, de dos antenas parabólicas y de unas complejísimas unidades complementarías de control. La antena mayor tiene un peso aproximado a las 10.000 toneladas; una impensable sensibilidad a los mensajes radioeléctricos, y, como el resto de la estación, fue construida con capital norteamericano y forma parte de un equipo cuyo valor, según cálculos moderados, no sena inferior a los 7.500 millones de pesetas. Desde marzo de 1970, la estación está íntegramente atendida por 160 técnicos españoles, pagados también por el Gobierno de Estados Unidos. Al margen de los costes de nuevos equipos, exige a Norteamérica una inversión anual de 520 millones de pesetas. Hoy tiene ya una larga tradición por su acompañamiento a una saga de artificios pioneros, marineros, exploradores y viajeros, que son la odisea del espacio.
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