Real Madrid-Real Sociedad, duelo devaluado

Real Madrid y Real Sociedad se enfrentan esta tarde en Chamartín en un encuentro, que si la temporada pasada supuso casi una final de la Liga, en esta ocasión se quedará en un choque devaluado. Aunque el cuadro donostiarra marcha ahora tercero de la tabla, a un punto de¡ Valencia y cuatro de la gran revelación, el Atlético de Madrid, no está tan bien de juego como entonces y además sufrirá hoy sensibles bajas, como Gajate, Cortabarría, Diego y, quizá, Zamora. El Madrid, en cambio, tiene su gran lastre en ser un insólito noveno, aunque a dos puntos de los realistas, cuando únicamente van disputadas diez jornadas. No tiene problemas de alineación, pero sí los tendría, y ya graves, cara al futuro, si pierde algún punto más en casa.

La Real Sociedad empató a dos goles la temporada pasada en Chamartín, cuando aún se mantenía imbatida y sus posibilidades de ganar la Liga no sólo estaban intactas, sino que parecían más claras que para. el Madrid. Este marcó su segundo tanto cuando la victoria donostiarra parecía un hecho y la Liga podía quedar casi sentenciada. Sin embargo, la lucha de los blancos, que se aprovecharían después de la sorprendente derrota realista ante un Sevilla con nueve hombres, dio sus frutos. En el transcurso del juego quedó patente la dureza y los malos modos de ambos equipos, que continuarían en el torneo veraniego de Palma, donde se volvieron a enfrentar. En Chamartín fueron expulsados Juanito y Górriz -entrada de éste y enzarzamiento mutuo-, y en Mallorca, Cortabarría por pisar a García Hernández, tras un codazo de éste que no vio el árbitro. Resulta evidente que ambos equipos están «picados» y sólo es de desear que, con el campo en no buenas condiciones por el mal tiempo -pese a los plásticos protectores-, las cosas no pasen a mayores.Boskov ya ha declarado que teme la defensa realista, pues un campo pesado favorece más al que debe construir. En realidad, el equipo de Ormaechea no tendrá más remedio que salir con precauciones, pues sus bajas serán demasiado importantes. A la ya vieja de Gajate y la confirmada de Cortabarría, en la defensa, se unirá la de Diego, que ayer estaba ya con fiebre. Como Zamora no parece del todo recuperado, el técnico realista posiblemente tendría que recurrir a Gaztelu. Uralde sustítuiría a Diego y ello obligaría a salir desde el principio a López Ufarte, que por las secuelas de sus dolencias renales sólo venía jugando las segundas partes. El 4-4-2, pues, será claro, con Górriz y Celayeta en el centro de la defensa, y Satrústegui e ldígoras como puntas.

El Madrid, al completo

El Madrid, en cambio, no tiene más preocupaciones que no dejarse sorprender, pues ceder algún punto más en casa, donde ha ganado sus cuatro partidos con más o menos comodidad, después de haber perdido ya cuatro fuera, sería un grave traspié. La victoria en Budapest frente al Honved, al menos, le ha quitado el miedo a la eliminación europea que le hubiese supuesto unas pérdidas económicas cifrables en unos doscientos millones -hoy se esperan treinta- y otras deportivas irreparables. El presidente, Luis de Carlos, habló antes del partido en el hotel Thermal, de la isla Margarita, situada en medio del Danubio, como si la victoria tuviese carácter de cruzada. Desde luego, el panorama madridista se habría ensombrecido hasta límites inso.spechados. Ni siquiera la situación del Barcelona hubiese servido de consuelo. En la Liga, nunca el Madrid había estado tan mal a estas alturas en los últimos tiempos.

Por todo ello, como en Budapest, es normal que el buen resultado de colocar allí a Stielike de defensa libre, para imponer respeto atrás, lo repita hoy Boskov. Al regresar Del Bosque al centro del campo, y ser útil García Hernández con su potencia de tiro, Gallego es posible que deberá quedar fuera del equipo, al ser preferido Angel. El resto no variará con respecto a los que jugaron contra el Honved, incluido Benito, que, sin estar bien de la rodilla, sobre todo para saltar, suple todo con su fuerza y pundonor habituales.

El Madrid deberá explotar las bajas del rival y en principio no le será difícil, pues la defensa y.el centro del campo realista se resentirá demasiado para eludir la lógica presión blanca. Arconada deberá demostrar en el campo una clase ya contrastada que no parece haberla puesto a disposición de sus compañeros en la AFE. Mientras Del Bosque se juega mucho por sus compañeros más desvalidos, él ha rechazado entrar en la junta directiva.