Desde ayer, aparcar en el centro cuesta dinero

Aparcar en el centro cuesta dinero desde primeras horas de la mañana de ayer, en que entró en funcionamiento la operación de regulación de aparcamiento (ORA), que afecta a ocho barrios. 560 empleados de la EMT se convirtieron, también desde ayer, en vigilantes de la operación, que fue calificada por el concejal de Circulación del Ayuntamiento de Madrid, Martín Palacín, como un éxito completo. No obstante, durante los dos primeros días -ayer y hoy-, los conductores que infrinjan las nuevas normas solamente serán apercibidos. A partir de mañana, en cambio, se harán acreedores a multas de quinientas pesetas.

La entrada en vigor de la limitación de aparcamiento en los barrios de Arapiles, Trafalgar, Recoletos, Goya, Justicia, Universidad, Palacio y Sol, en efecto, se dejará sentir a partir de mañana, una vez que termine el plazo dado por el Ayuntamiento, durante el cual los controladores de estacionamiento se limitan a anotar la matrícula de los vehículos aparcados y su situación en zona permitida o prohibida; asimismo los controladores, que han recibido un cursillo de preparación, apuntan si el vehículo tiene o no expuesta la tarjeta de residente o el bono de estacionamiento. El control de cada vehículo se realiza aproximadamente cada media hora, tiempo que, por término medio, tarda un controlador en realizar la ruta asignada.Estos controles servirán para que los vehículos que estén en zona prohibida o de carga y descarga, sin autorización, sean inmediatamente denunciados, al igual que los que ocupen una plaza sin tener alguna de las tarjetas que el controlador sabe válidas: la de residente definitiva, la de residente provisional o el bono de estacionamiento de media hora, una hora y una hora y media.

A mediodía de ayer, el barrio de Sol registraba una situación de aparcamiento similar a cualquier otro día laborable. Vehículos en zonas de carga y descarga y en zonas prohibidas eran registrados en las notas de ruta de los controladores. En los parabrisas vacíos, los nuevos vigilantes ponían avisos con instrucciones que, a partir de mañana, serán sustituidos por papeles en los que se anunciará que ese vehículo ha sido denunciado.

Menos tráfico

Calles como la de Princesa, Gran Vía, Alberto Aguilera o Goya registraron ayer un ligero descenso en su tráfico, que los estudios aclararán si se debió a la entrada en vigor de la medida.Junto a esta posible disminución de los vehículos se notó que algunos de los aparcamientos subterráneos registraron bien un completo desde las 10.30 horas, como pasó con el de Tudescos, o bien un aumento de vehículos que, por lo general, permanecían aparcados entre media y una hora, como ocurrió durante la mañana en el de Santo Domingo.

En general se notó una gran desorientación, puesta de manifiesto en las numerosas preguntas hechas a los controladores, que, vestidos con uniformes de la EMT, con un brazalete del Ayuntamiento en el brazo y una placa de controlador de estacionamiento, vigilaban los vehículos estacionados en su ruta.

Los estanqueros se vieron obligados, por su parte, a explicar en numerosas ocasiones cómo funcionaban los bonos de media hora, una hora u hora y media, que al precio de quince, treinta y 45 pesetas, respectivamente, se comenzaron a vender en gran número a partir de ayer. Aparte de verse incrementada la venta de estos bonos, los empleados de las casetas de la EMT situadas en el centro, comprobaron que durante el sábado pasado y la mañana de ayer, las colas para comprar bonos-bus fueron superiores a lo normal.

Sin embargo, según parece, tanto los compradores de los nuevos bonos de estacionamiento como los que han decidido optar por el autobús a partir de ahora contaron con que el Ayuntamiento no ejercería una excesiva presión el primer día; el número de viajeros de autobús fue similar al de otros días, y sólo contados bonos de estacionamiento fueron colocados en sitio visible, debidamente perforados.

Estos bonos no tendrán que ser utilizados para aparcar motocieletas, ciclomotores y bicicletas; taxis, siempre que el conductor esté presente; vehículos que realicen operaciones de carga y descarga, siempre que cumplan las normas y el conductor esté presente; vehículos en servicio oficial, debidamente identificados; vehículos pertenecientes a representaciones diplomáticas, ambulancias y demás vehículos destinados a la asistencia sanitana, que pertenezcan a la Seguridad Social o Cruz Roja Española, y vehículos que sean propiedad de minusválidos, si están en posesión de la correspondiente autorización.

Martín Palacín, satisfecho

El concejal de Circulación del Ayuntamiento madrileño, José Luis Martín Palacín, consideró un éxito el desarrollo del primer día de limitación de aparcamiento en el centro de la ciudad. El concejal recorrió personalmente la zona, y, según la oficina de Prensa municipal, se pudo advertir que los madrileños respetaron las nuevas medidas sin que se produjera incidente alguno. La fluidez de circulación ha mejorado sensiblemente. Por su parte, los 550 controladores municipales no pusieron multas ayer, y se limitaron a informar, verbalmente o por medio de folletos, a los automovilistas que aparcaron sus vehículos sin llevar tarjeta de residente ni el permiso temporal de estacionamiento