El Madrid se juega su futuro europeo hoy ante el Honved

El miércoles europeo será esta vez martes para el Real Madrid. El corto 1-0 logrado por el equipo blanco en el partido de ida no le permitirá errores en el de vuelta, que se jugará hoy a partir de las 17.30, hora española, si quiere pasar el cabo de los octavos de final de la Copa de Europa. La expedición española llegó a la capital húngara en avión tras hacer escala técnica en Viena. Se recuerda que el 24 de septiembre la selección empató a dos goles con la local, resultado que sería ahora magnífico. Pero el Madrid, tras su nueva derrota en Las Palmas, no parece estar para hazañas.

Boskov llevó a Budapest quince jugadores. Para la alineación inicial sólo mantiene una duda, la de Benito. Si el campo estuviese en buenas condiciones de juego, su concurso sería seguro, pero la nevada de ayer no dejó en buenas condiciones el terreno de juego y Boskov teme que una reaparición precipitada pudiera significar una nueva lesión en el central madridista, aunque ya jugó el sábado en Las Palmas.El Madrid va a salir a marcar un gol al menos. Para ello, Boskov ordenará a Juanito que sea un auténtico extremo, sin otra labor que la de facilitar balones a Santillana para el remate. Se pretende que la estrategia se lleve a efecto con la mayor disciplina porque en juego está nada menos que el futuro del equipo en la Copa de Europa.

Ambiente de triunfo

En Budapest, oscura desde bien temprano por la tarde, según es habitual en los países del Este europeo por las fechas actuales, ayer cayó la primera nevada del año y el campo no estará en buenas condiciones, por lo que Benito es probable que no juegue. De todas formas, el calor y el ánimo que normalmente le falta al alicaído fútbol húngaro de los últimos tiempos estará presente hoy en el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa de Europa. El no menos legendario Honved, que dio gloria al fútbol de este país hace veinticinco año, y que ha tardado se tiempo en volver a conquistar la Liga, puede dejar en la cuneta, de sendas tacadas, a todo el fútbol ibérico. Si en la primera bronca aún lo tuvo más fácil, pues venció ya en el partido de ida al Spórting portugués por 0-2 en Lisboa, y luego le derrotó por 1-0 en su casa, este último resultado solo le serviría ahora para llegar a una prórroga y quizá a los penaltis. Pero todo eso, y quizá más, está a su alcance, En cualquier caso, se comenta por aquí que hubiese hecho falta el típico gol de campo contrario y se teme, lógicamente, que le marque el Madrid.

El cuadro húngaro, que entrena Lajos Tichy, viejo delantero de la época posterior a la famosa de los Puskas, Kozsis, Groscis, Czibor, etcétera, confía, no obstante, en pasar la eliminatoria. Lo triste para el Madrid es que su confianza viene precisamente de lo mal que jugó el equipo blanco en Chamartín. Con sus hombres punta mas peligrosos, Bodonyi y Esternhazi, sin descuidar la defensa, más segura últimamente en casa, espera lograr la hazaña. Conviene no olvidar que para un Honved en renovación, con jóvenes que aspiran solamente a acercarse a viejas épocas de esplendor, sería un gran éxito apear de la competición a todo un ganador seis veces de la misma, aunque también se encuentre en horas bajas.

El Honved marcha bien colocado en la Liga de esta temporada cuando apenas se llevan disputadas tres jornadas de las 34 que se deberán celebrar en total. Con un partido aplazado, tiene dieciséis puntos por diecinueve de Ferencvaros, líder en solitario, ante el Vasas y el Videoton, ambos con dieciocho. En el último partido de Liga, jugado el viernes, ganó fácil al ZTE por 3- 1.

Hace poco más de un mes, el 24 de septiembre, la selección española empataba a dos goles en el clásico Nepstadion con la húngara, en la que figuraban varios jugadores del Honved, Boskov Firmaría lógicamente este resultado, e incluso un 2-1. Sólo un 2-0, un 3-1 o u 4-2 dejarían nuevamente fuera de «su» Copa al Real Madrid. No es descabellado pensarlo, pues esta temporada sus problemas han sido y son más que en otras ocasiones. Buena prueba de ello es que hace quince días tampoco hubo la típica «resurrección europea» blanca. La esperanza está en que se vuelva al túnel del tiempo.