La expulsión de Fraile complicó la victoria del Rayo
El Rayo se deshizo con apuros del Burgos, en un partido discreto y con abundante juego sucio. La torpe expulsión de Fraile complicó las cosas al Rayo en el último tercio del encuentro, pero el magnífico gol de Díez dejó el marcador en un tono de engañosa tranquilidad. El Burgos no dio la talla de ex primera con aspiraciones de retorno. Fracasó el debutante Moiseys.Salió con soltura el cuadro rayista. Marcó su gol, creó alguna ocasión más, pero sorprendentemente comenzó a diluirse de forma alarmante. El Burgos no supo entonces aprovechar el bajón de su rival.
La segunda parte se complicó. El Burgos estiró líneas y el Rayo se mostró incapaz de hacer otra cosa que agazaparse atrás. Un testarazo de Magdaleno y un enorme disparo de Juanjo los sacó Mora con buenas intervenciones. Y mientras, la pugna particular Magdaleno Fraile acabó por llegar a la guerra declarada. Fraile no enclaustró sus piernas, perdió los nervios y propinó un espectacular mamporro a su también marrullero adversario. El árbitro ni vio ni consultó con el juez de línea la acción, pero segundos después no hicieron falta mayores recursos visuales para comprobar la violenta entrada del central rayista, que vio así la expulsión. Siguieron las brusquedades, y volvieron a quedarse impunes dos feas acciones, la primera de Rocamora ante Pascual y la segunda del propio Magdaleno frente a Mora, que casi degenera en trifulca general.
