_
_
_
_

Una broma sin malicia estuvo a punto de matar a un hombre

L. C. J. de veinticinco años de edad, estuvo a punto de perder la vida a consecuencia de una broma que le gastaron unos sobrinitos suyos, de muy corta edad, que, sin duda, sin conocer el alcance de sus actos, le ofrecieron un vaso de agua en el que habían echado seis. somníferos. El tío sufrió una fuerte intoxicación y tuvo que ser trasladado en un coche del 091 a un centro hospitalario, donde se le pronosticó estado muy grave. El vomitivo y los sucesivos cuidados médicos lograron que se recuperara y que la broma no haya tenido consecuencias fatales.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_