Hoy se inauprura el III Certamen del Libro de Otoño

El II Certamen del Libro de Otoño,de Madrld,será inaugurado hoy en el paseo de coches del Retiro y en seis barriadas perifé ricas. Un total de 236 casetas, en las que se mostrarán escasas novedades editoriales y distintos actos culturales, constituyen todo el reclamo previsto por los organizadores durante los quince días que durará la feria. El certamen de este año, según todos los indicios mejor organizado que el año anterior, va a contar con las mismas dificultades de venta con que tropezó el pasado año, debido funda mentalmente a las fechas en que se realiza: comienzo del curso escolarcon un ímportante desembolso económico para libros de texto,y dificultades por falta de personal, especialmente en las librerías de la periferia.

En el Retiro, concretamente en el paseo de Coches, se instalarán 176 casetas de libreros y editores madrileños, aunque entre estos últimos hay que señalar las ausencias de Salvat, Espasa-Calpe y Rialp, que, según los organizadores, no asisten por estar en desacuerdo con la celebración de esta feria de otoño.Respecto a la periferia, este año la feria se extiende a una barriada más que el año anterior, aunque no se celebrará en Vallecas, por discrepancias entre el presidente de la junta y los libreros. Cada una de estas miniferias estará formada por diez casetas de los libreros del barrio, situadas en la glorieta del Marqués de Vadillo (Carabanchel), parque de Aluche (Latina), paseo de Alberto Palacios (Aluche), plaza de Quintana (Ciudad Lineal), avenida de Ramón y Cajal (Chamartín) y calle de Santiago de Compostela (Fuencarral).

Más colaboración económica que el pasado año

El certamen cuenta con la colaboración de la Delegación de Cultura del ayuntamiento, como ya ocurrió el pasado año, y además con la diputación, el Instituto Nacional del Libro y la Caja de Ahorros de: Madrid. Los organizadores destacan de esta colaboración la ausencia de la Dirección General del Libro, que, mientras que en la feria nacional aportó 9,5 millones de pesetas, a ésta no contribuye porque el presupuesto no cuenta con ninguna partida especial para certámenes locales.Dentro del capítulo de colaboraciones económicas, el ayuntamiento cobra 60.000 pesetas porcada caseta del Retiro, y solamente 3.000, en las periféricas, además de regalar seiscientas vall!is publicitarias. La diputación aporta 300.000 pesetas, más una caseta, y la Caja de Ahorros de Madrid, 359.000 pesetas. El INLE cede gratuitamente todo el material de las casetas, e incluso para este certamen ha conseguido reponer los 1.600 listones de aluminio que fueron robados de los almacenes- de Villanueva del Pardillo, aunque estos nuevos listones son de hierro. El ayuntamiento y la diputación facilitarán y ayudarán en todos los actos festivos y culturales que se celebrarán tanto en el Retiro como en los seis barrios, y en los que habrá orquestas, títeres, teatro infantil y conjuntos musicales.Pese a todas estas aportaciones económicas, algunos de los libreros que concurren a la feria aseguraban ayer que no esperaban tener grandes beneficios económicos durante estos quince días, aunque reconocieron que lo que es innegable es la rentabilidad que la publicidad de estar en el certamen les puede reportar a medio plazo.

La mayor dificultad para todos ellos -y que el año pasado se dejó sentir especialmente en la periferia- es la fecha del certamen. Antonio Albarrán, miembro de la comisión organizadora, resume los inconvenientes de esta feria en dos puntos: fecha incorrecta y escasez de novedades editoriales. «Pienso que en otoño debiera celebrarse una gran feria de carácter nacional e incluso internacional, y antes de que se celebre la de Francfort, en un local cerrado, que podría ser el pabellón de la Casa de Campo, en el que se expusieran todas las novedades editoriales y se celebraran actos informativos sobre los mismos».

En este mismo sentido se manifiesta Jesús Ayuso, editor y librero madrileño, quien considera que la rentabilidad económica de esta feria es más bien escasa. «El momento no es bueno, porque el presupuesto destinado a la lectura se va con los libros de texto».

Con todo, las casetas del Retiro ultimaban ayer todos sus preparativos para la feria y recibían los últimos libros. Los organizadores hablaban del boicoteo al certamen por parte de algunas editoriales. Se aseguró que Salvat se negó a suministrar ejemplares a los libreros hasta que concluyera la feria; pero, como aseguran los organizadores, son «pequeños problemas» que han ocurrido siempre en este tipo de certámenes y que no deslucirán el de este año.