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El atletismo norteamericano pasó el peor año de su historia

El atletismo norteamericano ha fracasado esta temporada. Ha sido este el peor año de su historia. Quizá haya influido la falta de motivación, al no haber estado presente en los Juegos Olímpicos, pero sus hombres prepararon esta competición como si fueran a asistir, y realizaron una gira por Europa compitiendo contra los mejores -rivales. Y a la hora de las marcas, sólo un atleta, Edwin Moses, acreditó un nuevo récord mundial. La mayoría de los topes humanos los realizaron esta vez atletas de otras nacionalidades.

Durante 1979, el atletismo de Estados Unidos sólo ha logrado un récord mundial a través de Moses, en 400 vallas, con un tiempo de 47.13. Esto es algo inusual, y al poderoso país le han ido arrebatando récords de tal manera que prácticamente le quedan ya sólo aquellos que lograra en los Juegos Olímpicos de 1968. gracias a la altitud de México. Moses, además, ha sido el único atleta que ha permanecido imbatido durante la temporada. Las demás estrellas norteamericanas, Floyd o Myricks, por ejemplo, han salido derrotadas de los enfrentamientos que han tenido con atletas europeos.Los grandes velocistas de Estados Unidos ya no son intocables, como en antaño. Primero fueron los atletas de las islas de¡ Caribe, y ahora los europeos, los que han demostrado que pueden correr tanto o más. E incluso la asombrosa marca de Beamon está amenazada en la actualidad- por un europeo, Dombrowski, que logró este año la segunda mejor marca mundial de todos los tiempos, con un salto de 8,54, superando a Myricks, que es el atleta en quien los norteamericanos ven al sucesor de Beamon. Las estrellas de¡ atletismo han tenido este año acento europeo. Ovett demostró ser tan bueno como Coe, Wessig puso fin al duelo entre Wszola y Moegeriburg; Kozakiewicz recuperó el récord mundial que tanto perseguía después de que se lo arrebataran Vigneron y Houvion, al igual que Sedykh, .que hizo lo propio con Litvinov; Paragi contiríuó la buena escuela húngara de grandes lanzadores, y Krastchmer demostró ser un atleta más-completo que Thompson. Todos estos atletas, sin llegar al carisma de Juantorena, Rono o Coe, grandes estrellas de los últimos años, fueron, junto con Moses, los que llevaron aún más lelos los límites humanos, y todos son europeos.

Simeoni, la excepción

En categoría femenina, Europa siempre ha dominado el atletismo. No es de extrañar, pues, que Estados Unidos no tuviera que mostrar nada durante la temporada. Las exhibiciones corrieron a cargo de los países de la Europa oriental. Sara Simeoni fue. un año más. la excepción y único exponente de que en los otros países del continente también puede haber figuras.Olizarenko, Kazankima y Tkachenko, todas soviéticas, junto con Slupianek, de la República Democrática Alemana. fueron las atletas que este año no se conforma ron en batir el récord mundial de sus especialidades, sino que, al poco tiempo, lo llevaron más lejos aún, acercándose así cada vez más al hombre. También soviéticas son las nuevas recordwoman de los 100 metros y lanzamiento de jabalina, Kondratieva y Variolina, respectivamente, aunque haya problemas de homologación para la marca de .la primera. El hecho de celebrarse los Juegos Olímpicos en Moscú fue un incentivo demasiado grande, y las atletas soviéticas se superaron esta vez.

La República Democrática Alemania fue quien este año no estuvo a la altura esperada. Sus figuras mostraron un excelente rendimiento la temporada pasada. Marita Koch, por ejemplo, para verse ahora eclipsadas; sólo en los relevos 4x 100 ejerció un dominio aplastante en lo que se refiere a marcas, comparándolas con las de otros países. La polaca Grazyna Rabsztyn sí estuvo en su línea al batir su propio récord mundial, y la búlgara Vergova se asomó por primera vez a la tabla de récords mundiales, tras lanzar el disco más lejos que Evelin Jahl, la gran especialista de los últimos años.

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