El equipo B entusiasmó en el segundo tiempo
Gustó el equipo B en Valencia. Tras llegar al descanso con dos golpes de ventaja de los húngaros, levantó el partido en el segundo tiempo, en el que entusiasmó al público con un juego alegre, rápido y profundo. Alcanzó el empate gracias a dos penaltis, pero tuvo ocasiones sobradas para ganar el partido.Fue decepcionante la primera mitad. El equipo español lució con buenas individualidades, pero faltaba juego de conjunto. Por su parte, los húngaros se mostraron como un equipo práctico y bien armado, y el juego discurría con mejores acciones por parte de los visitantes. En los últimos diez minutos de la primera mitad, Hungría acertó con dos tantos, el primero en fallo de Amador, que midió mal su salida, y el segundo por una torpeza de Víctor, que se dejó arrebatar el balón en el borde del área.
El público reaccionó vivamente, animando con más fuerza al equipo español, que al comienzo de la segunda mitad fue recibido con una gran ovación. Y la segunda mitad fue completamente distinta. A los dos minutos de la misma, una gran jugada de García Hernández dio lugar a un penalti, transformado por Rubio. Eso terminó de crecer al joven equipo español, que con unjuego rápido y preciso levantó una y otra vez al público de sus asientos. Dentro de un buen tono medio general, los extremos Marcos y Rubio hicieron diabluras y crearon enorme peligro. Fallos ante la puerta y grandes intervenciones del meta húngaro evitaron la victoria del equipo español, que llegó al empate gracias a otro penalti, transformado también por Rubio.
Finalizado el encuentro, Luis Sánchez, que dirigió al equipo desde el banquillo, se mostraba visiblemente satisfecho por el juego realizado, que, como ya queda dicho, fue verdaderamente brillante en varias fases de la segunda mitad. La selección B acreditó más ambición de triunfo y mayor velocidad que la A, y Luis Suárez manifestó que varios de los hombres que actuaron en Valencia pueden tener plaza en el primer equipo.
