Nace en Polonia el sindicato unitario independiente con el nombre de Solidaridad

Los 35 sindicatos independientes (MKZ) polacos decidieron ayer en Gdansk la formación de un «sindicato profesional independiente y autogestionado» bajo el nombre de Solidaridad, a propuesta de Lech Walesa, «para que no seconfunda con el nombre idéntico con que el Gobierno quiere bautizar a los sindicatos oficiales reformados»

.En una reunión de apenas dos horas se aprobó el estatuto único para los 35 MKZ por unanimidad, salvo cuatro abstenciones. Algunos miembros de empresas de Silesia expresaron su descontento por la rapidez de las votaciones, a lo que respondió Walesa, cada día más asentado en su puesto de líder indiscutible del nuevo sindicalismo polaco que «no había un minuto que perder frente a la campaña de las autoridades para desmontar las nuevas organizaciones obreras» que acaba de ser denunciada por cinco MKZ de las grandes empresas siderometalúrgicas.

Hoy, o mañana como muy tarde, los delegados de los 35 MKZ se trasladarán a Varsovia para inscribir sus sindicatos en el registro oficial. La estructura de los nuevos sindicatos sigue siendo un poco imprecisa, pero se corregirá en el próximo congreso de sindicatos independientes. El estatuto aprobado consta de 44 artículos y queda prohibida la pertenencia a otro sindicato.

De acuerdo con el espíritu de lo pactado entre los sindicalistas, la sede central de una confederación de sindicatos regionales potentes estará en Gdansk y será inminente la instalación en otros diecisiete MKZ de centros de información y contacto, con la sede central de Gdansk.

Las entidades rectoras del nuevo sindicalismo independiente serán el congreso, que se reunirá cada dos años, una comisión nacional de coordinación presidida por Lech Walesa y una comisión de revisión (como órgano de control de la comisión nacional).

De acuerdo con las cifras presentadas en Gdansk, unos tres millones de polacos, de una población activa de más de doce millones, han expresado su intención de adherirse a los nuevos sindicatos.

Coincidiendo con la aprobación del estatuto de los nuevos sindicatos, el órgano del sindicalismo oficial Glos Pracy lanzó ayer un llamamiento «a la cooperación y confianza mutua» entre las dos organizaciones laborales, «al margen de las fricciones esporádicas que se produzcan entre ellas».

Junto a esta puesta en marcha oficial del sindicalismo independiente, las autoridades consintieron, el pasado domingo, y por primera vez en la historia de la Polonia comunista, que se retransmitiese en directo la misa dominical.

La ceremonia fue oficiada por el obispo auxiliar de Varsovia, Jerzy Modzelewski, desde la iglesia de la Santa Cruz, en la capital polaca, y se llegó a captar en algunas zonas de la República soviética de Lituania, de gran mayoría católica, y en algunas zonas de la también República soviética de Ucrania.

El obispo, tras dar las gracias a la Virgen de Czestochowa, «reina de Polonia», aseguró que la retransmisión «era un momento histórico para toda Polonia». Tres mil personas asistieron en directo a la misa, y, a través de las ventanas abiertas, se podían oír los ecos de la ceremonia, que comenzó a las nueve de la mañana, hora de Madrid. Sin embargo, el obispo no hizo mención alguna a los nuevos sindicatos independientes.