_
_
_
_
Gente

Probablemente

el ladrón no sabía, cuando se hizo con el bolso de una joven de buen ver en unos céntricos almacenes de Londres, que su víctima era Lynne Frederick, la última esposa del fallecido Peter Sellers y que en él se encontraban lo que, la viuda considera como recuerdos inapreciables de su vida en común con el actor. El suceso ocurrió el pasado viernes, cuando Lynne Frederick compraba ropa de luto para asistir al funeral de su esposo. Con el bolso, el ladrón se llevó una cartera de piel que el famoso actor había regalado a su mujer el año pasado. «En la cartera había doscientas libras. Pero no me importa ahora el dinero. Quien lo tenga puede quedárselo. Yo sólo quiero el bolso, la cartera y una foto de Peter que está dentro, porque tienen para mí un gran valor sentimental».

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_