Dos muertos y cincuenta heridos en un atentado electoral en Bolivia
La campaña electoral boliviana se ha cerrado con un atentado terrorista en La Paz, que ha producido dos muertos y casi cincuenta heridos, algunos de ellos en estado crítico. Una granada militar de fragmentación fue lanzada el jueves por la noche contra una comitiva de la coalición izquierdista Unidad Democrática y Popular (UDP), que desfilaba por la ciudad tras la clausura de un gran mitin político.
A veinte metros escasos del lugar de la explosión de la granada, avanzaba el automóvil del líder de la UDP y candidato a la presidencia de Bolivia, Hernán Siles Zuazo, de 66 años, que resultó ileso. El atentado se produjo en el paseo del Prado, la calle central de La Paz, y justo a la altura del hotel donde se aloja este enviado especial, en cuya ventana hizo impacto alguna de las esquirlas del explosivo.
Nutrido tiroteo
Un nutrido tiroteo, que sembró el pánico entre los militantes de UDP, siguió al estallido de la granada de fragmentación, lanzada con toda probabilidad desde uno de los edificios bajo los que pasaba la manifestación. Dos jóvenes, de dieciséis y veintiún años, fallecieron a causa de la explosión. Varios de los heridos presentan impactos de bala. A la hora de redactar esta crónica se teme por la vida de otras cuatro personas sometidas a intervenciones quirúrgicas desesperadas.La mayoría de los partidos políticos que concurren a las elecciones de mañana han acusado al Gobierno de la presidenta Gueiler -que permanece reunido- de ser incapaz de garantizar el orden público. Hernán Siles Zuazo, a quien todos consideran el blanco de los terroristas, ha hecho unas declaraciones pidiendo al pueblo boliviano que acuda mañana a votar masiva mente, como mejor respuesta a los repetidos intentos para desestabilizar el proceso electoral de este país andino. El pasado día 2 de junio, una avioneta en la, que debía viajar Siles Zuazo hizo explosión al poco de despegar de La Paz. En el siniestro murió uno de los candidatos de la Unidad Democrática y resultó con quemaduras muy graves, de las que está siendo tratado en Washington, Jaime Paz, de 36 años, líder del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y aspirante a la vicepresidencia de Bolivia con Siles.
En el mitin con el que UDP cerró en La Paz su campaña electoral, el último acto político antes de las elecciones, Siles Zuazo prometió un programa de gobierno, «antiimperialista y antioligárquico» si llegaba a la presidencia. Según fuentes solventes a las que ha tenido acceso EL PAIS, un sondeo de opinión, encargado por Washington a la firma Gallup, muestra a la UDP (una problemática coalición de siete partidos en la que se dan cita desde el MIR hasta el PC boliviano) como favorita en las elecciones generales del domingo. La reservada encuesta norteamericana vaticina también un importante ascenso del general Hugo Bánzer, dictador de Bolivia entre 1971 y 1978, que podría quedar en segundo puesto.
El tribunal electoral ha dirigido una comunicación urgente a la presidenta Gueiler para que ordene taxativamente a sus ministros y a las autoridades regionales y policiales que se abstengan de influir en el desarrollo electoral. El tribunal afirma literalmente que «considera alarmantes las denuncias de parcialidad electoral por parte de miembros del Gobierno y autoridades a sus órdenes». Las presiones ejercidas desde la Administración estarían encaminadas a favorecer el triunfo de Víctor Paz Estenssoro, líder del Movimiento Nacionalista Revolucionario-Alianza (MNRA).
Paz Estenssoro, de 73 años, ha utilizado el Gobierno interino de Lidia Gueiler, ella misma dirigente de una fracción escindida del MNR, para colocar a sus partidarios en puestos públicos considerados claves.
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