Las dificultades se acumulan para los atletas españoles

La Westathletic, en esta ocasión, tiene un objetivo más importante que el propio triunfo. Más que ganar a Suiza, Holanda o Bélgica, prevalece la ilusión de lograr marcas a nivel olímpico, lo que llevaría sin duda al triunfo. El atletismo español tendrá veinte plazas para Moscú, que pudiera ser alguna más si se clasificara el relevo. En la actualidad ya son veinte atletas los que han realizado la marca mínima olímpica, pero la posibilidad real de que una decena más la consigan obliga a una criba. en la que los perjudicados serían los que quedaran peor clasificados en el ranking.De esta manera, tenemos que Carbonell, Sarría, Benjarnín González, Vargas, De la Infanta, los cuatro lanzadores y los equipos de relevos competirán en pos de una mínima olímpica que se les resiste, mientras que Trabado, José Luis González, Prieto, Moracho, Alonso, Menargues, Cabrejas, Oriol y Solanas lucharán por realizar una marca que tenga relieve internacional. Otro caso son las chicas. Es muy fácil que se conceda el pasaporte olímpico a toda aquella que haga la mínima, y quienes más fácil lo tienen son María José Martínez, Montserrat Pujol y el equipo de cuatro por cuatrocientos.

Carlos Gil, seleccionador masculino, intentará presentar el lunes a la federación un plantel de atletas a los que se les asegurará la participación en Moscú y que se sumarían a la lista de ocho que ya facilitó el pasado año. Todo ello, naturalmente, si el tiempo cambia y ayuda a la consecución de buenas marcas. En total, serán cuatro o cinco atletas los designados ahora, y el resto, hasta veinte, quedará para finales de mes, evaluando entre los que hayan hecho la mínima la validez que pueda tener en los Juegos cada marca. Precisamente por eso, los maratonianos Antón y Ortega quedarán para el final, puesto que al no poder hacer ya más pruebas, habrá que valorar en su momento si sus 2.14.0.0 del Campeonato de España pueden resultar mejores que 2,18 en altura, por ejemplo.

Precisamente este criterio restrictivo no ha gustado a los atletas españoles. Comentan entre ellos las supuestas cifras que recibieron los baloncestistas en los Juegos de Montreal y lo que podrán percibir los futbolistas en Moscú. Entienden que, si hacen mínima olímpica, tienen un derecho inviolable a participar, máxime en una competición donde el atletismo es el deporte rey.