Carpas, "black-bass" y tencas terminaron su letargo invernal

Tres especies piscícolas comienzan a ser ahora interesantes para los pescadores. Se trata de la carpa, la tenca y el black-bass, que han salido ya de su letargo invernal y emplezan a desarrollar una actividad importante. Las tres especies abundan en España y la carpa llega a alcanzar un peso superior a los veinte kilos.La primavera marca el fin del letargo invernal de las especies citadas, que con los primeros calores entran muy bien a los cebos. La carpa es la más abundante, ya que se encuentra hasta en los embalses del norte peninsular y comparte su hábitat incluso con la trucha en algunos embalses. Está prácticamente presente en todos los cauces fluviales y masas acuícolas, sobre todo en las zonas centro y sur peninsular. Se distinguen dos variedades de carpa: la común y la royal, pero su comportamiento es el mismo. Puede considerarse que es el mayor pez que puebla las aguas españolas, ya que todos los años -lo que no ocurre con ninguna otra especie- se controlan capturas excepcionales de veinticinco kilos de peso. Según su hábitat, alcanza un desarrollo distinto, y así está el embalse de Santillana, donde las capturas suelen ser de diez kilos o más, y el de Buendía, donde raramente llegan a los cinco kilos. Los cebos por excelencia para la carpa son la lombriz de tierra y la patata frita o cocida. Es conveniente efectuar un precebado el día anterior al que se vaya a pescar.

Por lo que se refiere al blackbass, se trata de una especie predadora que en raros casos pasa de los cuatro kilos de peso. Habita generalmente en los embalses de la mitad sur peninsular y en los ríos de corriente suave. Es, junto con la carpa, la única especie que comparte las mismas aguas que el lucio, y, al igual que él, se alimenta de peces vivos y, por tanto, entra a los mismos cebos que el exócido -cucharilla y pez artificial-, aunque también acude a la llamada de los saltamontes, lombrices, moscas o insectos, pero siempre vivos. El black-bass tiene un extraño comportamiento y a veces facilita su picada el mover a tirones rítmicos el cebo.

En lo concerniente a la tenca, la especie menos abundante de las ya citadas, tiene su ventaja sobre éstas en su mayor valor gastronómico. Extremadura es su hábitat por excelencia, y después, Andalucía y Castilla. El mejor cebo para la tenea, que llega a un máximo de tres kilos, es la lombriz de tierra. Al igual que la carpa y el black-bass, es amante de las aguas tranquilas y, sobre todo, templadas.

El panorama piscícola actual lo completa la posibilidad de pescar otras especies. Actualmente ninguna de las principales -salmónidos y ciprínidos- se encuentran en veda y todas desarrollan en esta época una gran actividad, con lo que las perspectivas de pesca son amplias y buenas, por lo menos hasta que llegue el verano con el estiaje de los ríos.