Oposición en medios empresariales a la capitalidad autonómica de Vitoria

Pese a las diversas reacciones de última hora, contrarias a la opción patrocinada por el PNV, puede darse por seguro que el Parlamento vasco, que se reune esta tarde en Bilbao, aprobará la designación de Vitoria como sede provisional de las instituciones autonómicas de Euskadi. Este desenlace era en realidad previsible desde el momento en que tal fue la opción por la que se inclinó la asamblea nacional del PNV celebrada tras las últimas elecciones. El carácter confederal del partido nacionalista jugó probablemente en favor de Vitoria, dado que en sus órganos cuentan con idéntico peso las distintas agrupaciones provinciales. Los delegados vizcaínos defendieron la candidatura de Bilbao, pero al voto de los alaveses en favor de Vitoria acabó uniéndose el de los representantes de los demás territorios, recelosos de un presunto «centralismo bilbaino».

Ante este silencio de los partidos, otras fuerzas sociales han tomado, casi a última hora, la iniciativa de defender la candidatura de Bilbao. Así, al pronunciamiento de la Cámara de Comercio de la capital vizcaína, que ofreció un edificio nuevo en el centro de Bilbao, se han sucedido los de Luis Olarra en nombre de la confederación de empresarios de Vizcaya y el del presidente de la Feria de Muestras de Bilbao, José Antonio Elustondo.El hecho de que tanto este último como la gran mayoría de los directivos de la Cámara de Comercio sean personal políticamente identificadas con el PNV, da particular relieve a sus pronunciamientos, que argumentan en base a criterios tanto de eficacia administrativa como de racionalidad económica. El propio presidente de la Diputación vizcaína, el peneuvista José María Makua, ha expresado a título personal su opinión favorable a Bilbao, aún admitiendo las razones políticas de su partido para preferir Vitoria.

Las centrales sindicales, por su parte, han evitado hasta el momento pronunciarse expresamente, aunque, en general, sus dirigentes reconocen en privado que Bilbao les parecería más adecuado.

Sin embargo, las escasas posibilidades que existían de que la oposición de todas las demás fuerzas obligase al PNV a reconsiderar su posición, parecieron desvanecerse ayer ante el anuncio de que el Grupo parlamentario Socialista votará finalmente en favor de Vitoria, pese a la conocida existencia de otras opiniones en el seno del partido.