La grúa
El sexto aniversario del inicio de la caída de las Bolsas nacionales fue celebrado con unas sesiones tristes, escasamente operativas, y en las que la única novedad discretamente positiva, si es que cabe calificarse como tal, era el discreto repliegue de las posturas vendedoras para los valores del sector bancario.El protagonismo en la mañana de ayer, en la Bolsa de Madrid, correspondió al mayor enemigo de los asistentes habituales a las reuniones: la grúa municipal, que comenzó su operación de limpieza de los vehículos mal aparcados en las puertas mismas del edificio, y generó una auténtica desbandada de público.
Quizá por esto, la oferta se mostraba más moderada, y los cambios se terminaron realizando con menos agobios que en jornadas precedentes. Con todo, los bancos volvieron a solicitar y obtuvieron autorización para no cubrir la oferta en los porcentajes preestablecidos, lo que viene a confirmar que la junta sindical, o sus miembros responsables, se pliegen con una facilidad asombrosa a los deseos de estas entidades, porque la realidad es que el volumen de oferta, que se aproximaba a los 70.000 títulos para el conjunto de los siete grandes, y esta cifra no justificaba la graciosa concesión.
Un valor que despertó comentarios fue Dragados. La falta de su comprador dormilón se hacía notar, y perdida la par, no encuentra fondo para su bajada. Concretamente, en Madrid, señalaba papel sin operaciones a 93%, en Barcelona operaba a 89% y en Bilbao marcaba cambio con dificultades a 85%.
